Los Knicks no están tan muertos

Jalen Brunson comanda la victoria de los neoyorquinos con 32 puntos, 5 rebotes y 5 asistencias.

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Por Jorge Roche

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Los New York Knicks no están tan muertos. Y por tanto, Cancún puede esperar.

En la pasada madrugada salvaron su primer match ball de estas Finales de Conferencia al imponerse a Indiana Pacers por 111-94.

Los Knicks dominaron la pintura de principio a fin, y de paso frenaron la sangría anotadora de los Pacers.

Fue su peor partido en los presentes playoffs, y de paso su menor anotación desde el pasado 4 de febrero de 2025.

Brunson fue decisivo una vez más dominando el primero y el tercer cuarto, y Towns se hizo gigante en la recta final del choque para recortar diferencias en la eliminatoria (3-2).

Los cánticos de los aficionados Knickerbockers retumbaron en el Madison Square Garden a finales del último cuarto: «Knicks in seven, Knicks in seven» (Knicks en siete).

«Este es un síntoma claro de que nuestro equipo ha respondido a la llamada», dijo Karl Anthony-Towns al diario NY Post.

«Pero en el siguiente partido tendremos que ser mejores si no queremos que la temporada termine», reconoció el pívot.

El próximo sábado, ya en terreno de los Pacers, los Knicks se jugarán «el todo por el todo» a partir de las 02:00 horas de la madrugada española.

Sí, mi capitán Brunson

Jalen Brunson tomó las riendas del partido desde el salto inicial y fue el más destacado de los Knicks con 32 puntos, 5 asistencias y 5 rebotes mediante un 12 de 18 en tiros de campo.

El base formado en Villanova ha entrado en los libros de historia de los playoffs con su décimo partido con al menos 30 puntos y 5 asistencias.

Uniéndose al selecto club que forman LeBron James, Michael Jordan, y también este año Shai Gilgeous-Alexander.

«Tenemos que intentar replicarlo en el siguiente encuentro», dijo Brunson.

Empezó con fuerza el capitán de los Knicks anotando 6 de sus primeros 7 lanzamientos a canasta con una diferencia de +11 puntos al descanso y con los Pacers limitados a un 37% en tiros de campo.

La asfixiante defensa de los neoyorquinos frenó en seco a los Pacers, y sobre todo a Tyrese Haliburton y su compañero Pascal Siakam.

Haliburton, héroe del Game 4 con un triple histórico, estuvo controlado desde el inicio con apenas 8 puntos, 6 rebotes y 2 asistencias en 32 minutos de juego.

Y lo mismo sucedió con Siakam. El camerunés fue el máximo exponente de los visitantes con 15 puntos, 6 rebotes y 5 asistencias en su haber.

«Jugaron más duro que nosotros», destacó el citado Siakam.

Los destacados

Todos respondieron esta pasada noche, pero sobre lo hicieron Karl Anthony-Towns y su compañero de pintura, Mitchell Robinson, que volvió a partir como titular.

El mastodóntico pívot registró 6 puntos, 6 rebotes, 1 robo y 2 tapones en poco más de 20 minutos, siendo decisivo en defensa y el rebote.

Por su parte, Towns dio «el do de pecho» cuando Brunson descansó, sobre todo en el tercer y cuarto periodo. Nuevo doble-doble para él con 24 puntos, 13 rebotes y 3 asistencias, y de paso con el mejor +/- de los Knicks con un +26 sobre la pista.

En el primer tiempo Towns también hizo historia en los Knicks al igualar al eterno capitán, Willis Reed, con su 70º doble-doble entre la temporada regular y los playoffs. Ambos son los únicos Knickerbockers que lo han conseguido hasta la fecha.

«En esta serie todavía no hemos podido cerrar los partidos como queríamos», admitió Towns.

«Hemos tenido momentos brillantes, pero no partidos brillantes. Creo que esta noche ha sido el testimonio de qué ocurre cuando jugamos concentrados los 48 minutos. Podemos demostrarle al mundo entero lo especiales que somos», explicó.

  • Brunson: 32 puntos y 5 asistencias.
  • KAT: 24 puntos, 12 rebotes y 3 asistencias.
  • Mikal Bridges: 12 puntos y 5 asistencias.
  • O.G. Anunoby: 11 puntos y 3 robos.
  • Josh Hart: 12 puntos, 10 rebotes, 4 asistencias y 2 robos.

Como último dato demoledor los Knicks superaron a los Pacers en puntos en la pintura por 60-34.

(Fotografía de portada: Imagn Images)

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