Se le notaba en los andares. Tenía el día marcado con rojo en el calendario. Tanto tiempo siendo nombrado bajo un apellido que no le pertenece debe hacer mella. Y lo de esta noche no era una anodina jornada de temporada regular NBA. Era un día para sentarse a comer en la misma mesa que su ídolo para terminar de matar al padre. Alperen Sengün miró a los ojos de Nikola para decirle que ya no era ‘Baby Jokic’.
El encuentro, uno de los de mayor nivel de lo que va de Eurobasket, tuvo mil variantes. Pero Sengün lo dominó de cabo a rabo (95-90). Incluso con un robo sobre Marko Guduric que fue el principio del fin para Serbia.
Sengün, en el nombre del padre
El primer par de posesiones del partido, Sengün trató de atacar a Serbia como venía pasando por encima a todos sus rivales. pero pronto se dio cuenta de que el desafío que tenía delante era distinto. Y al tercer posteo infructuoso, decidió jugar de cara y alejar a Nikola Jokic de la zona en la que se siente cómodo. Fue un primer cuarto de media y larga distancia. Y también de distribución, que de ello sabe un poco.
Acabó el encuentro yendo también al barro de la pintura cuando su equipo lo necesitaba. Y desde allí cerró una noche memorable en la que terminó con 28 puntos, 13 rebotes, 8 asistencias y 4 de 7 en tiros de tres.
Serbia estuvo a la altura
El partido fue disputado de de igual a igual. Y esto habla muy bien de Turquía, que hasta hace poco no parecía pertenecer a estas conversaciones, pero también de Serbia, que se ha repuesto bastante bien a la baja de Bogdan Bogdanovic. Los balcánicos comenzaron el partido con la aparente voluntad de no depender de Nikola Jokic. El pívot tocó menos balón de lo que es normal en los primeros compases y aportó básicamente desde el bloqueo. Terminó el primer tiempo con solo 5 tiros a pesar de que Turquía, con balón, le defendió en uno contra uno durante muchos tramos.
En su lugar, Serbia buscó que más jugadores formasen parte activa de la toma de decisiones y la creación de juego. Nikola Jovic estuvo más agresivo tras bote y lo mismo hicieron jugadores como Marinkovic, Stefan Jovic o Marko Guduric. También Aleksa Avramovic, que está dejando a deber con su selección de tiro durante el torneo. Por mucho que su defensa sea indispensable.
Sin embargo, conforme avanzó el partido, fue creciendo Jokic y la dependencia de sus compañeros con él. Sobre todo encontró petróleo en la siempre fructuosa conexión con Filip Petrusev, en trono a la cual Serbia construyó su dominio de la pintura. Terminó el parcial en la zona 42-26 a favor de los balcánicos.
En general, Jokic estuvo por debajo de su nivel y bastante exigido atrás. Ercan Osmani hizo un gran trabajo negándole balones, pero en un día normal el pívot de los Denver Nuggets se hubiese acabado imponiendo con claridad. Aún así, hablando de quién hablamos, acabó guiando a Serbia en todo ataque estático y siendo un bastión defensivo.
El escudero de Sengün
De Turquía sobre todo sorprende su capacidad de reacción. Hubo varios momentos, cuando Serbia apretó en líneas de pase y forzó varios errores y contras, en los que parecía que se escapaba el encuentro. Todo para que un par de triples ybuenas acciones atrás volviesen a equilibrar la balanza.
No encontró mejor escudero Sengün que Shane Larkin. Al que se vio desde el inicio con una electricidad especial. Como dicotomía a la versión mostrada por su eterno compañero Vasiljie Micic, que sigue penando por la cancha con algún que otro destello.
Larkin superaba con mucha facilidad la siempre pegajosa marca de Avramovic, pero sufría para mantener las ventajas vivas una vez tocaba pintura. Su exhibición fue sobre todo exterior, aunque sus viajes a la zona acabaron habilitando una montaña de tiros y situaciones de provecho para los suyos. Fue el segundo mejor del encuentro por derecho propio.
Jugadores destacados
Shane Larkin
Su poder balístico está intacto y fue un torbellino constante. Desde su absurda facilidad para generar triples tras bote sin aparente esfuerzo mientras sus manos y piernas cambian de sentido y dirección a la velocidad de la luz le dio orden a los otomanos. Como encontrar la paz en el caos.
Estadísticas: 23 puntos (5/8 T3), 9 asistencias.
Nikola Jokic
Comenzó el camino acompañado y dejándose caer en las manos de los suyos. Y lo acabó combatiendo solo. Especialmente en defensa, donde tuvo poca ayuda ante el imponente Sengün. Siendo realistas, Serbia no pudo hacer mucho más por él, aunque seguramente echó de menos a Jovic en el tramo final.
Estadísticas: 22 puntos, 9 rebotes, 4 asistencias.
Alperen Sengün
Hay partidos que suponen un antes y un después en lo individual. Y este ha sido el partido dentro del torneo que pinta a cambiar la vida de Sengün. De momento, en la NBA es una estrella que no llega a ponerse el prefijo de súper-. Sin embargo, Houston ya le ha dejado claro que el líder es él con la marcha de Jalen Green. Y este Eurobasket va camino de encumbrarle a nuevas cimas una vez cruce el charco de vuelta.
Estadísticas: 28 puntos, 13 rebotes, 8 asistencias.
(Fotografía de portada de FIBA Eurobasket)