Verano de paso por el taller en New Orleans Pelicans y no necesariamente para volver con una carrocería mejorada. Más bien se lamen las heridas. DeMarcus Cousins (Warriors) y Rajon Rondo (Lakers) salieron del equipo, que había alcanzado las semifinales del Oeste la pasada temporada y, a cambio, han llegado Elfrid Payton y Julius Randle. La sensación inicial, pues, es de cierta pérdida de argumentos por el camino.
Los Pelicans superaron el pasado curso por primera vez una ronda de playoffs con Anthony Davis como cabecilla, pero la Conferencia Oeste se ha puesto más dura en solo un par de meses. Ha llegado LeBron James y hasta seis o siete franquicias (Warriors, Rockets, Lakers, Jazz, Thunder, Wolves, Nuggets, Spurs…) podrían situarse, de inicio, por delante de New Orleans en la carrera por los playoffs.
Eso y la salida de Cousins y Rondo podría devolver a New Orleans a la casilla de salida del proyecto; tocará pelear en el barro por los últimos huecos de los playoffs. Eso es precisamente lo que buscan las franquicias interesadas en hacerse con Anthony Davis, que el jugador acabe desgastando su paciencia en Luisiana debido a no gozar de compañía competitiva.
Según apuntó el periodista Chris Mannix (Yahoo! Sports), la línea a seguir por las organizaciones que anhelan a Davis es precisamente ésa, dejar que la propia situación del equipo agote la paciencia del jugador.
Nada de traspaso, por ahora
El ala-pívot (25 años) posee contrato en vigor hasta el año 2021 (opción de jugador el último año) y en New Orleans no existe ningún interés en traspasarle, ni ahora ni nunca. Sin embargo una situación deportiva límite la próxima temporada podría mover a Davis a solicitar una salida, tirando por tierra el proyecto iniciado por su actual franquicia en 2012 con la elección número 1 del Draft.
En la temporada 2018-19, Davis contará con la ayuda de los citados Payton, Randle, Nikola Mirotic, Jrue Holiday, Solomon Hill o E’Twaun Moore.
En el pasado, sobre todo los Boston Celtics mostraron interés por un hipotético movimiento para reclutar a Anthony Davis. Se supone que la entidad verde, igual que el resto de interesados, permanecerán agazapados cruzando los dedos en aras del hundimiento de los Pelicans.