Los Atlanta Hawks han aprendido la lección y no quieren repetir errores de su pasado reciente. El año pasado no dudaron demasiado en ofrecer extensiones a Kevin Huerter y John Collins, pero esta vez parece diferente. Este verano el que es elegible para extender su contrato rookie es De’Andre Hunter, al que solo le resta un año. Sin embargo, la posición de los Hawks dista bastante de la de los agentes del jugador. Ahora mismo la negociación está estancada.
Según detalla Jake Fischer en su último artículo para Bleacher Report, estas diferencias se cifran en unos veinte millones de la suma multianual total. Hunter y sus representantes han acudido con la reciente firma de Keldon Johnson como ejemplo de sus demandas. El de los Spurs ha acordado con San Antonio 80 millones de dólares por cuatro años. Lo cual situaría la oferta de Atlanta en unos 60 millones por el mismo tiempo. La cifra estaría por debajo del contrato que firmaron con Kevin Huerter en 2021.
Aunque se desconoce el por qué ofertan tan a la baja, cabe esperar que esa cifra se deba a la poca continuidad física que ha demostrado Hunter desde su llegada a la NBA. A punto de comenzar su cuarta campaña en la liga el jugador tan solo ha disputado un total de 139 partidos de liga regular. Una media de 46 encuentros por temporada en los que ha promediado 13,2 puntos y 4,1 rebotes en 30 minutos de juego por noche.
(Fotografía de portada de Kevin C. Cox/Getty Images)