La aventura de Brandon Ingram en New Orleans toca a su fin. Tras seis temporadas en la organización de Luisiana, el alero All-Star entra en su último año de contrato y las opciones de que siga son mínimas, ya que según informa Jake Weinbach de ESPN Radio el plan es buscar un traspaso.
No es ninguna sorpresa. David Griffin anunció hace algunos días que el planteamiento de dar continuidad a la plantilla se había terminado dados los pobres resultados y que ahora tocaba construir un nuevo proyecto alrededor de Zion Williamson; y sí, en esa revolución está subrayado en rojo el nombre de Ingram como uno de los que debe salir.
Siguiendo esta línea, Evan Sidery de Forbes Sports explica que más allá de que los Pelicans encuentren o no un traspaso que les satisfaga, la decisión es no firmar en caso alguno una extensión a Ingram, ya que prefieren poner el dinero en Trey Murphy III, quien ese elegible este mismo verano para cerrar una extensión a escala novato que se movería entre los 20 y 25 millones de dólares anuales.
Volviendo a Ingram, en Luisiana tienen el objetivo de incorporar una estrella al equipo que acompañe a Zion, por lo que su salario de 36 millones de dólares podría sumarse a algunas rondas del draft para dar forma a un paquete atractivo para otros equipos.
(Fotografía de Sean Gardner/Getty Images)