Un trance de eterna despedida es, en gran parte, a lo que se están remitiendo Los Angeles Lakers esta temporada. Con cualquier pretensión deportiva, en el espectro de acabar entre los ocho primeros, abandonada, un final feliz para Kobe Bryant es de lo poco a lo que pueden aspirar en Lakerland. O, si Byron Scott sigue así, puede que ni a eso.
Bryant ha estado sufriendo molestias las últimas semanas que no le están permitiendo despedirse de algunos pabellones como le gustaría. Su última traba se la está produciendo el tendón de Aquiles. En el último partido ante NOLA jugó la primera parte y se retiró con molestias y por precaución.
Esta noche tocan los Warriors, y el ’24’ estará en la lista de convocados.
Los médicos piden reposo
La cuestión es el orden de jerarquía a la hora de administrar la salud del escolta. Puede que favorezca el espectáculo, pero desde luego no su salud. Y a la larga, de tanto llevar al cántaro a la fuente, puede que se rompa por ambos costados. Ni pan ni circo.
Según informaciones de Los Angeles Times y Los Angeles Daily News, los médicos del equipo y en particular Gary Vitti, su jefe de fisioterapia, cree que lo más recomendable es darle entre 1 y 2 semanas de descanso absoluto a Kobe para sanar ese tendón.
Por su parte, Scott, eludiendo una de sus funciones como entrenador, dejará nuevamente que sea La Mamba quien tenga la última palabra. «Mi mayor preocupación es que quiero que este hombre termine la temporada y logrando todo el respeto que merece».
Entre Scott, Kobe, Kupchak, y oyendo a medias los consejos de Vitti, decidirán.