Comienzan a conocerse los detalles sobre el reciente despido de Doc Rivers como entrenador jefe de Los Angeles Clippers. Si bien Adrian Wojnarowski, de ESPN, adelantó la inesperada noticia, ahora Jovan Buha de The Athletic informa que la decisión se debió a una acumulación de diferencias entre Rivers y Steve Ballmer, dueño del equipo, a lo largo de los años y, especialmente, en las últimas semanas. Se descarta así cualquier tipo de reacción precipitada por parte de la organización ante su pronta eliminación de los playoffs.
Doc Rivers y Ballmer mantuvieron varias reuniones en las que conversaron sobre diferentes aspectos del equipo, como sus aspiraciones en esta temporada, según fuentes cercanas a Buha. Mientras que Ballmer y la front office creían que los Clippers eran los favoritos para ganar el campeonato de la NBA, Rivers consideraba que la plantilla era insuficiente para conseguir el anillo.
Dadas las circunstancias, ambas partes llegaron a la conclusión de que tenían puntos de vista diferentes sobre cómo debía avanzar el equipo, lo que derivó en la decisión de mutuo acuerdo. Aunque la eliminación en semifinales de la Conferencia Oeste supuso una debacle para los angelinos, la salida de Rivers no deja de ser sorprendente dadas las informaciones que aseguraban su continuidad al frente del equipo; además de restarle dos temporadas más de contrato.
Tras la remontada sufrida contra los Denver Nuggets, Rivers se convertía en el único entrenador de la historia que ha dejado escapar una ventaja de 3-1 en varias ocasiones —total de tres—. Aún así, la reputación del técnico y la gran cantidad de banquillos disponibles actualmente le convierten en una figura muy codiciada, despertando el interés de equipos como Philadelphia 76ers y New Orleans Pelicans.
(Fotografía de portada: Michael Reaves/Getty Images)