Dyson Daniels y los Atlanta Hawks han comenzado a negociar una posible extensión de contrato, pero los avances hechos por ahora son escasos. Así lo asegura al menos Jake Fischer en The People’s Insider, donde señala que las primeras conversaciones han evidenciado que hay mucha distancia entre ambas partes y no permiten ser optimistas con respecto al acuerdo.
Este es un problema en el que Daniels no está solo, pues los jugadores que llegaron a la NBA en 2022, que son los que pueden firmar la extensión de su contrato de rookie este año, se están encontrando con bastantes reticencias. Las nuevas limitaciones salariales han hecho a las franquicias bastante más cuidadosas a la hora de gastar y comprometer dinero a la largo plazo, dificultando acuerdos con jóvenes emergentes que buscan su primer gran contrato.
Por ahora, solo cinco hombres han alcanzado estas extensiones: Palo Banchero, Chet Holmgren, Jabari Smith Jr., Jalen Williams y Nikola Jovic. Y aunque aún queda tiempo para que otras negociaciones avancen, pues el plazo para la firma del acuerdo no concluye hasta el día 20 de octubre, no parece que esta lista vaya a ampliarse en exceso.
Daniels, como vigente ganador del premio a Jugador Más Mejorado, tiene argumentos para ser el siguiente, pero tal vez incluso él tenga que esperar. Fischer no da detalles acerca de sus pretensiones salariales, pero sí señala que, de consolidar su salto de nivel, podría buscar un contrato cercano a los 30 millones de dólares anuales el próximo verano, en el que más equipos tendrán espacio, cifra a la que parece que en Atlanta no quieren acercarse demasiado aún.
(Fotografía de portada: Dale Zanine-Imagn Images)
