Nueva York, fuente incansable de rumores una vez que la temporada finaliza para los Knicks, sigue generando información a raudales y, tras especularse con los movimientos por Karl Anthony-Towns o Zach LaVine; con una posible salida de Julius Randle o R.J. Barrett, muchos se preguntan qué ocurrirá con los respectivos nuevos contratos de Josh Hart e Immanuel Quickley.
Respecto a Hart hay muy pocas dudas al respecto. Michael Scotto del medio HoopsHype.com informaba que desde el Draft Combine NBA varios ejecutivos de la liga apuntaban a que terminará renovando con los Knicks, y se especula que será mediante un contrato de cuatro años adicionales a razón de entre 15 y 18 millones de dólares anuales.
El que fuera escolta de los Blazers tiene el respaldo absoluto tanto de la directiva de los Knicks como del técnico Thibodeau. Asimismo, Hart ya ha dejado claro que le gustaría «echar raíces» en Nueva York junto a su mujer, quienes recientemente han estrenado paternidad.
En 25 encuentros oficiales en Nueva York atesoró unos guarismos de 10,2 puntos, 7 rebotes y 3,6 asistencias en media hora de juego.
¿Traspaso a la vista?
El tema de Quickley es algo más complicado. Los Knicks tienen que acometer este verano la renovación de Hart; y también están los grandes contratos de Brunson, Randle y Barrett. El joven base ha brillado en su cuarto curso con los Knickerbockers siendo finalista para el Mejor Sexto Hombre del Año, y cuando ha actuado como titular, todavía ha brillado más (22 puntos por jornada).
Quickley afronta su último curso garantizado de su contrato rookie valorado en poco más de 4 millones de dólares, y el citado Scotto informa que su renovación oscilaría entre los 90 o 100 millones de dólares repartidos en cuatro años. Quizás aceptaría una pequeña rebaja por su deseo de continuar ligado a los Knicks a largo plazo.
No obstante, tanto Scotto como su compañero Ian Begley no descartan su salida en un supuesto movimiento que les reporte otro jugador estrella que estarían buscando. Su nombre estaría encima de la mesa además de Toppin, Quentin Grimes y una de tantas futuras rondas del Draft que atesoran.
Thibs no se mueve
Por si había alguna duda. Thibodeau no se mueve. Tienen el total y absoluto respaldo del Vicepresidente Leon Rose. Los Knicks pudieron despedirle tras su arranque negativo de 10-13; no obstante, prefirieron darle un voto de confianza, y no se equivocaron, alcanzando finalmente los playoffs tras clasificarse como 5º de la Conferencia Este. El técnico jefe afrontará su cuarto año en el banquillo, y habrá que seguir de cerca su futuro en la Big Apple más allá de 2024.
(Fotografía de portada: Elsa/Getty Images)