Los Detroit Pistons demostraron esta temporada que el proyecto va por buen camino y que ya están más que preparados para codearse con la élite de la Conferencia Este. Pese a la eliminación en primera ronda ante los New York Knicks, los de Michigan dieron una gran imagen y solo la falta de experiencia les previó de apear a los neoyorquinos.
Con buenos mimbres y una plantilla tan joven como talentosa, en las oficinas de Detroit priorizarán la paciencia, los pequeños retoques y el desarrollo de la actual columna vertebral del equipo. Salvo que una súper estrella de la NBA se ponga a tiro. Y con súper estrella nos referimos a Giannis Antetokounmpo o Devin Booker, según señalan desde el medio The Detroit Free Press.
Los Pistons confían totalmente en su young core y los complementos de los que disponen, por lo que solo moverán ficha si se pone a tiro algo completamente irrechazable. Es decir, ir paso a paso o subir cinco escalones de golpe, por lo que solo harán un movimiento de cierta magnitud por un jugador de élite.
De hecho, los Pistons emergen como una de las plazas con activos de sobra para acometer una gran operación. Además de salarios y jóvenes con potencial, el general manager Trajan Langford dispondrá también de hasta cuatro picks de primera ronda y tres swaps para negociar. Assets que, de momento, ahorrarán a la espera de esa estrella que colocar al lado de Cade Cunningham.
(Fotografía de portada de David Reginek-Imagn Images)