Dominar en temporada regular antes de fracasar estrepitosamente en playoffs. Esta ha sido la narrativa seguida por los Milwaukee Bucks durante las últimas dos temporadas. Los de Wisconsin no han sido capaces de extender esta superioridad durante las series por el título, donde la mayor intensidad de las defensas y las pocas alternativas ofensivas mostradas por la pizarra de Mike Budenholzer han desencadenado en sendas decepciones.
Una reflexión que comparten las franquicias de la NBA. La gran dependencia en Giannis Antetokoumpo y los problemas de este con el tiro han sido uno de los grandes temas de discusión en Milwaukee. Y no parece que las cosas vayan a cambiar a corto plazo.
El dos veces MVP de la temporada sigue sin abrazar la consistencia en el triple, donde su acierto apenas alcanza el 27,6% en comparación al 30,4% firmado el pasado curso. Tampoco está mostrando una productividad regular en el tiro libre, con un 63,3% de acierto que iguala la peor marca de su carrera, firmada el año pasado.
Así, la narrativa se escribe una vez más desde la misma distancia: aquella que separa el aro de la zona restringida. De hecho, el 64% de sus intentos los realiza a menos de tres metros del aro, con una efectividad del 82,8%. Según se va alejando de la canasta su eficacia se esfuma.
Por ello, varios ejecutivos y scouts de los equipos de la NBA vuelven a cuestionar las armas de los Bucks para luchar por el anillo. Más bien, la capacidad del internacional griego para ser verdaderamente diferencial en los momentos más calientes y decisivos de los partidos.
Según el periodista de ESPN Tim Bontemps, varios ojeadores de la Conferencia Este le han trasladado su escepticismo acerca del liderazgo de Antetokounmpo en estos instantes. «¿Vas a ganar con él anotando un 63% en tiros libres? Es un gran problema». Una postura que también comparten al otro lado del país. «No sé si Khris Middleton será lo suficientemente bueno como para elevarse como el hombre a quien acudir en los finales», habría añadido un scout de la Conferencia Oeste.
En efecto, la aparente simple fórmula de colapsar la pintura ha sido suficiente para neutralizar a los Bucks en sus dos últimas eliminaciones en playoffs. Toronto Raptors y Miami Heat simplemente se limitaron a cerrar la vía directa al aro y enviar constantes ayudas sobre Giannis cuando este recibía el balón en el exterior. Una estrategia que ahogó al griego y que obligó a los Bucks a optar por finalizar posesiones en malas posiciones de tiro.
Nuevamente, los Bucks se han mostrado a un gran nivel pero las sensaciones apuntan a que la incorporación de Jrue Holiday no parece suficiente para solventar la ecuación. Y la incógnita, quizá, no tenga que ser despejada por los jugadores sino por Budenholzer.
(Fotografía de portada de Jason Miller/Getty Images)