Kyrie Irving, lesionado de su rodilla izquierda desde el pasado mes de abril, espera estar recuperado para el inicio de la próxima pretemporada 2018. El base ha base ha tenido un pequeño contratiempo en su recuperación al sufrir una infección en la zona operada.
«Si le preguntas a alguien por esto, probablemente tratará de minimizar el asunto. Es algo que tu cuerpo ha tenido que pasar. Sufría una pequeña infección en una parte de mi cuerpo donde no necesariamente podía alcanzarlo con mis manos. Teníamos que examinarlo y ver que ocurría… En mi caso fue que el cableado y los tornillos que tenía en la rodilla, la infección estaba ahí. Así que tuvimos que retirarlos y tomarme antibióticos durante un par de meses», explicó a ESPN.
Irving, que podría entrar en su último año de contrato si finalmente rechaza su ‘opción de jugador’, promedió en la temporada regular 24,4 puntos, 3,8 rebotes, 5,1 asistencias, 1,1 robos y 32,2 minutos en 60 encuentros oficiales.
Junto a Gordon Hayward, el base formado en la Universidad de Duke es la principal esperanza de los Celtics para pelear por las finales de conferencia, objetivo que se escapó hace escasos meses tras caer por la mínima ante Cleveland Cavaliers (4-3).