Escuchar que un jugador pida el máximo salarial lesionado de la gravedad de Jabari Parker –volverá allá por el mes de febrero tras 12 meses inactivo– puede sonar extraño. Sin embargo, los 20,1 puntos, 6,2 rebotes y 2,8 asistencias que promedió en los 51 partidos que disputó en el curso 2016-17 abren el debate.
Lo hacen porque tanto el jugador, principal interesado, como la franquicia, están seguros no solo de que retornará al mismo nivel, sino que lo hará siendo mejor. Desde esa óptica, y si se terminase cumpliendo, claro está que irse al mayor número de verdes posibles es una petición nada alocada. Pero, ¿está Milwaukee Bucks dispuesto a ello?
Saldremos de dudas antes del 16 de octubre. Es ese día, dentro de poco más de un mes, cuando se cierra el plazo para firmar las extensiones para aquellos que están en su contrato rookie. Si en Wisconsin siguen pensando que su jugador mantendrá una línea que podría llevarle a ser All-Star, podrían firmarle el máximo salarial.
Más allá de qué piensen en la gerencia de los Bucks –ahora dirigida por John Horst–, la idea de Jabari Parker es pedir un contrato máximo de cinco temporadas que se movería entre los 146 y 175 millones de dólares, informa Gery Woelfel. Si no lo consigue, ser agente libre restringido en 2018 es la alternativa.
A la espera de conocer la respuesta de Milwaukee, sabemos ya que las negociaciones han comenzado y que desde el lado del jugador son optimistas. «Hemos tenido discusiones. Ha sido un diálogo positivo, pero es todo lo que puedo decir en este momento», explica el agente de Jabari, Mark Bartelstein.
El mejor pagado
Si Milwaukee y Parker acabasen cerrando un acuerdo máximo, eso convertiría al ala-pívot en el jugador mejor pagado de los Bucks, ya que Giannis Antetokounmpo firmó en septiembre de 2016 un contrato de cuatro años y 100 millones de dólares. Este dato nos lleva a otra pregunta: ¿sería correcto dar el máximo a Parker cuando no se hizo con Antetokounmpo?