Keegan Murray y los Sacramento Kings han acordado prolongar su vinculación. Según informa Shams Charania, periodista de ESPN, el ala-pívot ha firmado una extensión de su contrato de rookie por cinco temporadas a cambio de 140 millones de dólares, cerrando así su primer gran acuerdo en la liga y quedando vinculado a la franquicia hasta el año 2031.
Sacramento Kings forward Keegan Murray has agreed to a five-year, $140 million rookie contract extension with the franchise, Mark Bartelstein and Kyle McAlarney of @PrioritySports tell ESPN. Massive new deal for the Kings to lock in their 2022 No. 4 overall pick through 2030-31. pic.twitter.com/ga08ANk26I
— Shams Charania (@ShamsCharania) October 15, 2025
Sacramento demuestra así su confianza en un jugador que, tras una excelente temporada de novato, viene de dejar más dudas en los últimos cursos. Con su excelente tiro exterior, buena defensa y madurez, justificó con creces su cuarta posición en el Draft de 2022 en su primer año, pero desde entonces el crecimiento demostrado ha sido escaso y de hecho su lanzamiento de tres ha ido perdiendo eficacia con el paso de las temporadas.
No obstante, los Kings ha decidido asegurar su continuidad y lo han convertido en el sexto jugador de su generación que alcanza esta extensión, que aquellos elegidos en primera ronda del Draft de 2022 pueden firmar antes del inicio de liga regula. Murray se une así a Palo Banchero, Chet Holmgren, Jabari Smith Jr., Jalen Williams y Nikola Jovic, mientras que el resto por ahora va camino de ser agente libre restringido en 2026 salvo acuerdo de última hora.
En plena recuperación
La noticia ha llegado poco después de saber que Keegan no podrá estar presente en el inicio de liga regular por culpa de una lesión en su dedo pulgar de la mano izquierda, que lo tendrá apartado entre cuatro y seis semanas. Una vez superado ese tiempo, podrá hacer gala en la pista de los méritos que lo han ayudado a firmar esta extensión y ayudar a los Kings a no caerse de la pelea por un play-in que se les ha puesto más caro que nunca.
(Fotografía de portada: Darren Yamashita-Imagn Images)