Así como en 2010 LeBron James aceptó una rebaja salarial para que Miami Heat pudiera formar el famoso Big Three junto a Chris Bosh y Dwyane Wade, fuentes de ESPN señalan que el cuatro veces MVP buscaría el máximo salarial en su nuevo contrato, es decir, unos 22,2 millones de dólares por temporada.
Pese a las primeras informaciones, James ha dejado caer que no estaría tanteando un contrato de cuatro o cinco años. El jugador ha admitido que la flexibilidad de su futuro será importante en su nuevo acuerdo.
Por el momento solo siete equipos de la NBA podrán acceder a la petición del jugador: Miami Heat, Orlando Magic, Los Angeles Lakers, Phoenix Suns, Dallas Mavericks, Utah Jazz y Philadelphia 76ers.
El resto, de no hacer movimientos en sus cuentas, no podrán ofertarle al jugador los 22,2 millones que demandaría. Así como en 2010 James sacrificó dinero, actualmente no tiene pensado hacerlo.
Si hace cuatro años fue el centro de todas las críticas por el famoso programa «The Decision» y las reuniones que mantuvo con hasta seis franquicias, en la actualidad será su agente el que asuma las negociaciones previas para después, si gusta lo que ofertan, formalizar una reunión presencial.
Miami Heat es el equipo con mayor espacio en sus cuentas, unos 55 millones de dólares, sin embargo, si quieren acogerse a la petición del jugador, deberán valorar si también renuevan a Dwyane Wade, Chris Bosh u otros jugadores que también finalizan compromiso.
Respecto a los Lakers y Suns, es conocido su fuerte interés en intentar la contratación de James. Junto a ellos, Bulls y Cavaliers, aunque todavía no tienen el suficiente espacio, también se presentan como serios candidatos para hacerse con sus servicios.