El proyecto de los Rockets se desmorona y muchos de sus jugadores podrían abandonar la nave en las próximas fechas. Una de las piezas que está generando un gran interés entre las franquicias de la liga es Eric Gordon. Según el periodista de ESPN Adrian Wojnarowski, el teléfono del general manager Rafael Stone no ha parado de devolver tentativas sobre la situación del escolta.
Actualmente, una plaga de lesiones ha afectado la plantilla de Texas, que acumula una racha negativa de trece derrotas consecutivas. A medida que se acerca la fecha de cierre de mercado del 25 de marzo los rumores se agolpan en las puertas de las oficinas de Houston.
En el caso de Gordon, su contrato supone un arma de doble filo. Al de Indiana le restan otros tres años de contrato, el último de ellos no garantizado (solo lo estaría si es elegido All-Star o gana el campeonato), por una cantidad de 58,6 millones de dólares. Una duración y cuantía asumible para aquellos equipos que busquen competir ya, pero que, quizá, pueda dificultar el proceso de cuadrar las cuentas más adelante.
A sus 32 años, Gordon está promediando 17,8 puntos y 2,7 asistencias en 29,3 minutos. El escolta está luciendo mucho más explosivo y agresivo este año para atacar el aro, mientras su acierto exterior ha disminuido en los últimos dos cursos por debajo del 33%. Aún así, su extenso historial de lesiones supone una preocupación añadida.
Wojnarowski ha señalado que los Rockets se han mostrado «muy activos» en las conversaciones de traspaso pero no mencionó ningún potencial comprador ni el punto de origen de los interesados.
Paralelamente, los Rockets también podrían dar salida a Victor Oladipo y P.J. Tucker en las próximas semanas. Ambos casos más urgentes al tratarse de jugadores inmersos en su último año de contrato.
(Fotografía de portada de Carmen Mandato/Getty Images)