De cara a la temporada 24-25, la lista de jugadores con contrato garantizado en los Philadelphia 76ers es la siguiente: Joel Embiid. Eso es todo. Si somos realistas, podemos añadir a Tyrese Maxey, agente libre restringido al que no dejarán ir, y a Paul Reed, con contrato no garantizado pero al que no parece que vayan a despedir. De resto, todo está en el aire, y hay muchos huecos que llenar. Algo que en al franquicia quieren hacer con caras conocidas.
Según asegura Keith Pompey, del Philadelphia Inquirer, los 76ers buscarán garantizar la continuidad de Kyle Lowry, Kelly Oubre Jr. y Nicolas Batum, conformando así una rotación veterana pero sólida. Todos ellos se unieron a la plantilla durante el pasado curso y tuvieron contribuciones importantes a pesar de la derrota en primera ronda frente a los Knicks, y desde la gerencia esperan que puedan mantener su buen nivel estando mejor acompañados a partir del próximo curso.
Oubre fue el primer en llegar al equipo, pues lo hizo como agente libre con un contrato de 2 millones de dólares que, dado su rendimiento, se antoja ahora mismo muy escaso. Con 15,4 puntos por partido, supo usar sus armas anotadoras para ser una parte importante de la ofensiva del equipo y liberar algo de peso en ataque a Embiid y Maxey, y aunque no es conocido por su defensa, su altura le permitió molestar a Jalen Brunson durante la eliminatoria de playoffs y firmar buenos tramos en esta faceta. Es probable que reciba ofertas mucho más generosas en cuanto arranque el mercado, y será interesante ver cuánto están dispuestos a darle en Philadelphia para garantizar su continuidad.
Batum, por su parte, acabó en el equipo como parte del traspaso de James Harden a los Clippers, y no tardó en demostrar que sigue estando capacitado para ser un jugador que aporte en muchas áreas. Con 5,5 puntos, 4,2 rebotes y 2,2 asistencias por encuentro, sus números no terminaron de ser del todo llamativos, pero su impacto fue notable gracias a su inteligencia y veteranía, capaces de hacerle entender qué necesitaba de él el equipo en cada momento. Además, contó incluso con noches en las que sí destacó de forma llamativa, con el choque play-in ante los Heat en el que anotó 20 tantos.
Por último, Lowry fue adquirido tras su salida de Miami y su despido en Charlotte, y, de forma similar, su veteranía, garra e inteligencia le hicieron sumar pese a estar ya lejos de su mejor nivel. El base es de esos jugadores a los que siempre querrías en tu bando en un partido a vida o muerte, y los 76ers intentarán que vuelva a ser así cuando dé comienzo la nueva temporada.
(Fotografía de portada: Tim Nwachukwu/Getty Images)