Tom Thibodeau aceptó de buen grado el puesto de entrenador jefe de los New York Knicks el pasado 25 de julio, antes de que se desatara un torrente de movimientos entre los banquillos de Philadelphia, Indiana, Houston, Chicago y Oklahoma City.
Thibs podría haber recibido el interés de cualquiera de ellos; sin embargo, decidió confiar en el presidente Leon Rose, a quien conocía muy bien de su etapa al frente de la empresa de representación deportiva CAA (Creative Artists Agency).
«Acepté este trabajo porque confío mucho en Rose», reconoció Tom Thibodeau en una entrevista concedida a través de Zoom y recogida por el diario NY Post.
El proyecto de Leon Rose y Tom Thibodeau es de suponer que será a largo plazo, ya que éstos acordaron un contrato mediante 5 temporadas. Entre ambos tienen la difícil papeleta de sacar a los Knicks del pozo e instaurar una cultura ganadora con algo de sentido, algo que no pudieron hacer sus antecesores Phil Jackson o Steve Mills-Scott Perry.
Al frente de las operaciones deportivas estarán el citado Rose y Williams Wesley, antiguo miembro de CAA y su mano derecha y vicepresidente. Junto a ellos también tendrá voz y voto Thibodeau, y así lo ha reconocido, que se le tendrá en cuenta en las próximas decisiones de la franquicia y, sobre todo, en el Draft 2020 donde atesoran las elecciones número 8º, 27º y 38º. El objetivo parece ser un base, aunque no descartan guiarse por otros senderos, tales como un ala defensivo, y ya ha surgido el nombre de Isaac Okoro, formado en la Universidad de Auburn.
«Creo que como entrenador jefe, lo único que quieres es tener voz en las decisiones. Creo que se habló mucho del título de presidente (su etapa en Minnesota), pero también tuve un general manager y los asistentes de éste que hacían a lo largo del día muchas cosas que haría un general manager normal», explicó.
«Esa experiencia me ha ayudado de muchas maneras. Creo que lo importante para mí es simplemente poder tener voz. Conozco a Leon y Wesley desde hace mucho tiempo, por lo que me han pedido mi opinión en muchas cosas. No significa que harán los que les pida, pero creo que hay un factor de confianza grande en mí, así que creo que es importante», destacó.
Thibodeau ha demostrado a lo largo de su carrera ser un sólido entrenador, aunque su punto fuerte nunca ha sido ser «un desarrollador» de jugadores. Sin embargo, en Nueva York debe adaptarse a su nuevo puesto y sacar lo mejor de sus futuras promesas sin olvidarse de competir. Algo en lo que ha hecho hincapié, asegurando que no busca el tanking, tal como hiciera su colega de profesión David Fizdale y que no duró mucho en el cargo.
«Obviamente el desarrollo de los jugadores es fundamental. Pero además no se puede perder de vista el desarrollo del equipo. Así que no es solo el desafío de sacar lo mejor del jugador, sino también saber sacar lo mejor de este equipo. Y el equipo tiene que estar muy arriba. Tiene que estar en la parte alta de la clasificación. Todos tienen que sacrificarse por el bien del equipo. Ganar es lo más importante. Por eso estás aquí», concluyó.
Para el próximo curso 2020-21 tendrán garantizado su contrato Julius Randle, R.J. Barrett, Frank Ntilikina, Dennis Smith Jr., Kevin Knox, Mitchell Robinson e Ignas Brazdeikis. Por otro lado, cuentan con una opción de equipo sobre Bobby Portis, y no están al cien por cien garantizados los veteranos Taj Gibson, Wayne Ellington, Elfrid Payton y Reggie Bullock.
(Fotografía de portada: Matthew Stockman/Getty Images)