Desde que Jeanie Buss se hizo con el poder en Los Angeles Lakers, toda letra que salga de las manos de Ramona Shelburne es poco menos que una declaración pública de la mandamás. A pesar de la venta del equipo a favor de Mark Walters, Jeanie seguirá siendo la gobernadora al menos 5 años, según desvelaron recientemente en The Athletic. Y es ella quien probablemente gestione la franquicia cuando llegue la retirada de LeBron James.
La situación entre el conjunto angelino y la que hasta hace no demasiado era su máxima estrella está en un punto raro. Con James ejerciendo presión como viene haciendo desde hace varios años pero, por primera vez, con los Lakers teniendo un colchón llamado Luka Doncic para no sobrerreaccionar a las amenazas de James.
Y, según cuenta Shelburne en su último artículo en ESPN, los Lakers utilizarán este poder negociador para poner fecha de caducidad a la estancia de LeBron: primavera de 2026. Al parecer, la organización no ha mostrado ni la más mínima intención de renovarle a dos años vista (1+1) como suele ser costumbre. Lo cual vendría a ser una declaración de intenciones.
En la pieza la periodista especifica que, sea o no la última temporada de LeBron en la NBA, la franquicia no pondrá de su parte por continuar la relación finalizado el actual contrato de James. Centrándose en Doncic de cara a atraer otra estrella en 2027, que serían los veranos en los que saliesen Giannis Antetokounmpo y Nikola Jokic.
Sabiendo que lo que dice Shelburne es palabra de la líder de los Buss, ¿tratará LeBron James de forzar su traspaso en busca de un mejor escenario para levantar su quinto campeonato? En el horizonte aparecen, otra vez, los Golden State Warriors, quienes ya lo habrían intentado en el cierre del mercado 2024.
(Fotografía de portada de Matt Blewett-Imagn Images)
