Fuera de rotación, sentenciado por los 76ers este curso y de cara al futuro, a Jahlil Okafor no le queda ya mucho que hacer en Philadelphia. Tras anunciar la franquicia que no ejercería su opción por él para retenerlo una cuarta temporada, el número 3 del Draft de 2015 se convertirá en agente libre restringido el 1 de julio de 2018.
Pero hasta ese punto no quieren llegar ni el jugador ni los Sixers, que han intentado colocar sin éxito esta pieza en el mercado. Okafor no cuenta para Brett Brown, que sólo lo ha situado en pista un partido, precisamente el duelo en el que Joel Embiid descansó, porque los médicos no le permiten todavía jugar dos noches seguidas. Okafor estuvo en el parqué 22 minutos en la paliza sufrida ante los Raptors y firmó 10 puntos y 9 rebotes. No fue una mala hoja estadística, pero Embiid le cierra las puertas a cualquier aspiración.
‘Buy out’ a la vista
Los Sixers no pagarán los 6,3 millones de dólares que percibiría Okafor de haber seguido en la 2018-19 pero quizá tampoco obtengan nada a cambio esta temporada. Según informa Marc Stein, para The New York Times, el jugador querría acelerar su final en Philadelphia y buscaría salir de la franquicia mediante un buy out que se tendría que negociar entre las partes.
El pívot roza los 5 millones de nómina para este curso, de los que apenas ha cobrado una pequeña parte porque estamos al inicio de la campaña. En cuánto se cifraría la rescisión y la libertad de Okafor es algo que no ha trascendido, pero el jugador no desea que llegue julio y se convierta en agente libre restringido. Los Sixers tampoco lo quieren. Todos parecen desear una solución, con febrero como fecha límite para los traspasos. Sin embargo, el camino del buy out puede ser más gravoso pero rápido para los intereses de los 76ers