Las cosas no funcionan en San Antonio. Los Spurs arrastran nueve derrotas en los últimos diez partidos, son la quinta peor defensa (cada 100 posesiones) de la competición —con la deshonra que eso implica en la tradición de la franquicia— y presentan el tercer peor récord (6-13) de la Conferencia Oeste.
Todo un desierto dentro de la fértil jungla que fueron las dos últimas décadas, desde 1998, en la era Gregg Popovich, con presencias ininterrumpidas en los playoffs. Las estrellas actuales del equipo LaMarcus Aldridge y DeMar DeRozan, están anotando con regularidad pero eso no permite al equipo salir de las cloacas de la liga.
Es por tal motivo que no es nada descartable que los Spurs lleven a cabo un movimiento de evacuación pronto; de romper con el proyecto actual, antes del deadline del próximo 6 de febrero. Si el equipo insiste en acumular derrotas, nada impedirá a San Antonio armar un traspaso de grandes dimensiones, contando además con que DeRozan puede ser agente libre el próximo verano. El escolta y máximo anotador de los Spurs posee una opción de jugador (27,7 millones de dólares) en su contrato que, en caso de ser rechazada, podrá salir al mercado para ganar más dinero.
La comunión DeRozan-San Antonio no está resultando todo lo balsámica que pensaron en Texas tras la marcha de Kawhi Leonard, en 2018. En su primera temporada, a punto estuvo de alcanzar las semifinales del Oeste, pero no hubo machada ante Denver. Más bien por el flácido arranque del presente curso, cada vez son más los rumores que apuntan a la posible salida de DeRozan.
Y no es que esté empleándose rematadamente mal en el plano individual. DeRozan promedia (22,1) más puntos que el pasado curso (21,2) y presenta el mejor porcentaje de tiros de campo (53,1) de toda su carrera. Sin embargo, esos brotes verdes no están significando victorias en su equipo. Más bien todo lo contrario.
Ya sabíamos que los Orlando Magic eran uno de los posibles interesados en el escolta, y ahora también hay que apuntar a los Sacramento Kings, quienes según un directivo al que pudo consultar el portal Hoopshype, también tendría cierto interés en DeRozan.
No es ninguna quimera pensar en la salida del escolta y estrella de los Spurs. Primero, porque no alcanzó un acuerdo para extender su contrato en San Antonio el pasado verano. Segundo, por los malos resultados actuales. Y tercero y último, porque en verano podría irse gratis y la franquicia texana podría querer aprovechar su salida para obtener algo a cambio y, de ese modo, resetear la plantilla con algún activo de futuro. Si no están dispuestos a dejar mucho dinero en su continuidad, podrían optar por que es mejor es traspasarle ahora y ahorrarse el trámite de pujar por él en julio.
DeMar DeRozan será uno de los nombres a los que prestar más atención en las próximas fechas, antes del cierre de los traspasos de esta temporada (6 de febrero).
(Fotografía de portada: Ronald Martinez/Getty Images)