Hace justo una semana saltaban las alarmas. ESPN anunciaba que Kawhi Leonard mantenía una actitud “distante” y “desconectada” con los miembros de San Antonio, tanto de la directiva como del cuerpo de entrenadores.
La franquicia de Texas apenas tardó en desmentir la información, algo que haría de igual manera un familiar del alero. Sin embargo, eso no evitó que las oficinas de otros equipos pensasen: «¿Y si puedo conseguir a Leonard?».
Con esa incertidumbre en el aire no tardó en sonar el teléfono en el despacho de los Spurs. Descolgaron sí, pero para decir ‘no’ sin escuchar ninguna propuesta, informa Steve Kyler de Basketball Insiders citando fuentes de la liga.
La lógica se impone. Aunque la relación entre Leonard y el equipo se hubiese visto algo afectada, muy al límite se debería llegar para que San Antonio se deshiciera de un jugador de 26 años que en plena forma puede ser el mejor defensor de la competición, algo a lo que se une su evolución hasta ser un jugador de élite en ataque.
Extensión en el horizonte
Con contrato en vigor hasta 2019, Leonard podría firmar una extensión de jugador designado el próximo verano; es decir, tendría ante sí una oferta de cinco años con un salario que solo podría ofrecerle San Antonio. Si llegado ese momento Leonard recula llegará el momento de plantearse el futuro. Por ahora, pese a que ambos estén frustrados por la prologanda lesión, toca mantener la calma.