Este martes se cumplía el plazo de seis semanas de recuperación dado por New Orleans, pero el jugador ni siquiera ha vuelto a entrenarse aún
Seis semanas fue lo que los New Orleans Pelicans diagnosticaron a mediados de octubre como período de baja más optimista para Zion Williamson; como situación idílica, en caso de que todo fuera rodado. El fenómeno ex de Duke se desgarró el menisco lateral derecho de su rodilla el 13 de octubre y su recuperación, lejos de haberse completado como anticipaban las primeras quinielas, se está alargando.
Como pudo hacerse eco el periodista Andrew Lopez (ESPN), los Pelicans están siendo «extremadamente cautelosos» en la rehabilitación de Zion. No quieren acometer ningún riesgo o prisa innecesaria que pudiera damnificar el físico de su diamante en bruto de cara a próximas temporadas.
El caso es que Zion no solo no ha regresado después de las seis semanas exactas (se cumplen este martes) desde que fuera operado en el menisco, es que todavía no ha retomado los entrenamientos y tampoco se conoce con exactitud cuándo podrá hacerlo. Sigue, sencillamente, pendiente de evolución y recuperándose de la operación.
Hace un par de semanas se habló de que el fenómeno colegial podría estar listo para mediados de diciembre, sin embargo esos supuestos no han sido confirmados en ningún caso.
«Creo que él está bien, pero no creo que la cosa vaya a poder adelantarse. Es una cuestión que lleva tiempo. Seis semanas es lo que dijimos, obviamente él está progresando. Cuando llegue el momento de empezar a trabajar en la cancha y ese tipo de cosas, lo hará y ya está. Es una cuestión de dar tiempo al tiempo para asegurarnos de que todo esté bien», podía contar al técnico de New Orleans, Alvin Gentry, después del último entrenamiento de su equipo, en el que tampoco estuvo Zion.
Los Pelicans son conscientes de que su gema tiene que ser tratada con extrema delicadeza para que pueda brillar por tiempo indeterminado. Mucho se ha hablado sobre las rodillas de Zion Williamson y sobre sus cerca de 130 kilos de peso dentro de un cuerpo inferior a los dos metros (1,98 según las medidas oficiales de la Liga). La NBA no vio nunca un físico parecido antes y por eso en Luisiana andan con pies de plomo, para no romper el invento antes de tiempo. No es que el peso de Zion vaya a liquidar la carrera del jugador a las primeras de cambio, pero sí que hay que afinar los estudios y la ciencia avanzada para que el envoltorio de Williamson no sufra la erosión continuada a lo largo de los meses.
En esa pelea se encuentran los Pelicans, en la de conocer un poco más con qué están tratando y cómo pueden protegerle de sí mismo, de sus despiadadas condiciones naturales; por tal motivo, no correrán ningún riesgo con Zion, mucho menos antes de haber debutado en la liga y con un historial de lesiones de lo más repleto en los últimos meses. Paciencia, Zion jugará, pero no queramos acortar su carrera antes de tiempo.
(Fotografía de portada: Chris Graythen/Getty Images)