La paciencia se está agotando en la capital de Estados Unidos. Si la llegada de Jordan Poole se vio hace meses como la posibilidad de dar forma a una nueva estrella de la NBA, su flojo rendimiento parece estar haciendo virar de forma drástica a los Wizards; tanto es así que según señala el periodista Marc Stein, empieza a ser probable que lo muevan en cuanto surja una oportunidad interesante.
No es una sorpresa. El nivel del guard sobre el parqué está muy lejos de lo esperado. En Washington le han dado las llaves del equipo y él está respondiendo con unos números realmente malos. Hablamos de un promedio de 15,5 puntos por noche, con un 39,2 por ciento en tiros de campo y 27,8 por ciento en triples. No es que pensasen que iba a hacerlo algo mejor, sino muchísimo mejor.
¿Es precipitado? Quizás. Pese a comprobar que no es lo que esperaban y que no será una pieza esencial en un proyecto a largo plazo, en estos momentos el valor del jugador está en su punto más bajo; y es que a su bajo rendimiento en la pista hay que sumar un contrato garantizado hasta 2027, por el cual debe percibir un total de 130 millones de dólares.
(Fotografía de Patrick Smith/Getty Images)