Solo con que la intención vaya más allá del verbo, y lo termine materializando o no, eso es lo de menos, ya serán grandes noticias para los Phoenix Suns.
Hablamos del segundo equipo que más lástima dio en defensa la pasada temporada, con un defensive rating de 114,2, solo por encima de Cleveland Cavaliers. Su ataque tampoco es que estuviese en las antípodas, esa es otra… más bien en paralelo (tercero peor de la liga)… pero por algo hay que empezar; y las franquicias exitosas, dice la historia, se construyen desde atrás. Por eso, declaración de intenciones como la de Kelly Oubre Jr. son muy importantes.
El alero, que ha plasmado su firma en un acuerdo por dos años y 30 millones, pretende hacerse merecedor del mismo no solo desde el talento, sino desde sacrificio. Mientras la mayoría de jugadores de su perfil sueñan y aseveran soñar con el All-Star, Oubre piensa en el primer equipo del All-Defense.
«Soy un jugador de mentalidad defensiva. Veo como un orgullo ser un jugador two way. No me gustan los jugadores unidimensionales. Por lo tanto, defender para mí siempre ha sido tanto el pan como la mantequilla, para llegar a donde estoy ahora… y quiero continuar en esa dirección, en la búsqueda de ser el mejor defensor que pueda. Mi objetivo es aparecer en el first-team All-Defense numerosas veces en mi carrera, y ser elegido Jugador Defensivo del Año».
Innato
Si en, quizás, otros jugadores, sospecharíamos de declaración bienqueda y postureo de pretemporada, en Oubre sabemos que no se trata de un hablar por hablar. La fama de buen defensor lleva labrándosela desde el instituto y la NCAA como jugador de Kansas, destacando en sus años en Washington como el hustle player que todo entrenador ansía tener. A su tenacidad atrás ha ido añadiendo, con el paso del tiempo, un mayor aporte en ataque, mostrándose cada vez más versátil, aunque aún debe mejorar bastante en su acierto en el tiro a canasta (sobre todo desde el triple).
El curso pasado, marcado por su cambio de Wizards a Suns a mitad de ejercicio, promedió 16 puntos, 4,9 rebotes, 1,5 robos y 1 tapón en 40 encuentros con su actual camiseta.
Los ‘nuevos’ Suns
Su fichaje, sumado al de Ricky Rubio y Aaron Baynes, supone un claro giro de timón en la idea de compensar una plantilla que con Devin Booker y DeAndre Ayton no carece de anotación, pero necesita, y con urgencia, dejar de ser una orgía para los ataques rivales.
En la universidad sorprendió con unos stats avanzados tremendos para un forward (2,3% de robos y 2,8% de tapones –fuente Bright Side Of The Sun-). Ahora el objetivo, en la analogía, sería convertirse en una especie de Robert Covington u Otto Porter Jr., pero incluso con más talento esencial para herir en ataque que cualquiera de ambos.
(Fotografía de portada de Christian Petersen/Getty Images)