Los New Orleans Pelicans no lograron sellar su clasificación para el torneo play-in y afrontan ahora un verano en el que tendrán que tomar decisiones importantes. Una de ellas señalará directamente hacia el banquillo.
Según el periodista de The Athletic, Sam Amick, la relación del head coach Stan Van Gundy con algunos jugadores del vestuario ha pasado por momentos de tensión a lo largo del curso. Los Pelicans contrataron al técnico en octubre de 2020 con el objetivo de inculcar nuevos valores en la organización, reforzar el compromiso y ayudar al equipo a lograr sus objetivos a corto plazo.
Sin embargo, la plantilla no ha terminado de conectar con Van Gundy y Eric Bledsoe admitió hace poco más de un mes tras un partido que los jugadores han perdido cierta confianza sobre las decisiones del técnico.
Los Pelicans finalizaron la temporada regular con un récord de 31-41, a dos partidos de distancia de los San Antonio Spurs, quienes marcaron el corte del play-in. Perder agrava la mayoría de los problemas, principalmente en un equipo tan joven en el que este tipo de situaciones amplifica la frustración.
El vicepresidente de operaciones, David Griffin, tiene la principal responsabilidad sobre el futuro de la franquicia, principalmente en lo que se refiere a la confección de la plantilla y la figura encargada de liderar el banquillo. Las tensiones existentes corren el riesgo de aumentar y dinamitar las altas esperanzas del proyecto.
En Nueva Orleans disponen de una tremenda oportunidad para crecer alrededor de Zion Williamson. Y para ello será fundamental el fomentar la mejor cultura posible.
(Fotografía de portada de Steph Chambers/Getty Images)