El futuro de DeMar DeRozan sigue en el aire. Siendo la pieza más interesante de los agentes libres que aún están disponibles, lo único claro es que no volverá a los Chicago Bulls. Tal decisión, en la cual están de acuerdo ambas partes, es confirmada por Chris B. Haynes de Bleacher Report, quien a su vez arroja luz sobre el camino que puede tomar el alero All-Star y las pretensiones del mismo.
Si al inicio de la agencia libre el equipo que parecía mejor colocado para conseguir a DeRozan eran los Lakers (información de Adrian Wojnarowski de ESPN), ahora tal escenario ha perdido solidez justo porque las exigencias del jugador de 34 años están siendo vistas por los interesados como excesivas. El citado periodista ya avisaba que los angelinos necesitarían hacer algún movimiento previo para hacer sitio a DeRozan y ahora ocurre prácticamente lo mismo com Miami Heat, equipo que se reunió ayer con DeRozan y que sigue en contacto con él; eso sí, con una perspectiva poco halagüeña.
Más allá de cuál sea el próximo destino del jugador natural de Compton, éste quiere un buen contrato; es más, a los equipos que le han llamada ofreciendo una mid-level exception que debe rondar los 13 millones de dólares les ha dicho que ni se plantea tal posibilidad.
Pese a que está realmente complicado, en los Bulls se han ofrecido a plantear con DeRozan un sign-and-trade para que pueda jugar en el lugar que elija. Sin embargo, todo vuelve a complicarse por el hecho de que en Illinois no querrían obtener de vuelta gran parte del salario que envían, algo que es casi seguro que necesitará hacer la franquicia que adquiera al small forward por esta ruta.
Volviendo a Miami, estos entienden que el fichaje de DeRozan sólo podrá llevarse a cabo si se termina convirtiendo en una ‘ganga’. El jugador les gusta y entienden que podría aportarles mucho, pero no están dispuestos a remover en exceso la plantilla que tienen conformada para hacerle sitio. Por ello, mantienen igualmente sobre la mesa la opción de traer de vuelta a Caleb Martin o Haywood Highsmith. Más claro: los Heat están en la mezcla, pero no piensan hacer locuras (y menos tras cerrar el fichaje de Alec Burks).
(Fotografía de Rich Storry/Getty Images)
