De nada le sirvió a Quentin Grimes su magnífico rendimiento tras ser traspasado a Philadelphia. O al menos en lo financiero. El escolta tomará la oferta cualificada de 8,7 millones de dólares que podía ejercer hasta hoy mismo tras no poder llegar a ningún acuerdo con los 76ers.
En las últimas jornadas se había filtrado que jugador y franquicia estaban muy lejos en sus proposiciones de contrato. Con los Sixers queriendo darle menos de diez millones por año. Mientras el ex de Knicks, Pistons y Mavs demandaba algo cercano a los 25 anuales.
De esta forma, Grimes quedará totalmente libre de cara a la agencia libre de 2026, en la que podrá firmar con cualquier equipo. Aunque, más allá de su condición como restringido, lo que ha terminado dilapidando su precio ha sido la falta de ofertas por el corto espacio salarial que manejaba la mayoría de la liga.
En sus dos meses en Philadelphia, Grimes promedió 21,9 puntos, 4,5 asistencias, 5,2 rebotes y 56% en tiros de campo en 28 partidos. De cara a esta nueva temporada, más teniendo en cuenta la lesión de Jared McCain, parte como favorito para ser el alero titular de los de Pensilvania.
(Fotografía de portada de John Jones-Imagn Images)