Una canasta puede cambiar el devenir de toda una serie. Cuando todo parecía indicar que Boston conseguiría una ventaja prácticamente insalvable de 3-0, un triple de O.G. Anunoby hizo que las esperanzas de Toronto resurgieran por todo lo alto. «La cagaron», comentó Fred VanVleet sobre sus rivales consciente de la oportunidad que se le presentaba a los Raptors tras aquella canasta. Ahora, a pocas horas del Game 5 y con una igualdad máxima en la eliminatoria, resulta necesario analizar qué aspectos pueden resultar determinantes en este encuentro.
Tiro exterior
Existe una dinámica opuesta entre ambos equipos: el tiro exterior. Mientras que los Celtics han mostrado una tendencia decreciente en su acierto desde la línea de tres puntos durante el transcurso de la eliminatoria, los canadienses han aumentado progresivamente sus prestaciones desde el exterior en los últimos encuentros.
Los de Massachusetts son el segundo equipo que más triples lanzan en playoffs (solo por detrás de Houston). Comenzaron la serie con un gran nivel de acierto, anotando 17 triples (43,6%) en el Game 1 y 15 (39,5%) en el Game 2. Si bien su derrota en el tercer partido se produjo en los instantes finales, el equipo entrenado por Brad Stevens no superó el 31% en el lanzamiento exterior, quedándose en 9 triples. Sin embargo, Boston realizó su peor partido en playoffs desde el triple durante su más reciente tropiezo en el Game 4, donde tan solo convirtió 7 de sus 35 lanzamientos (20%).
Por su parte, los Raptors igualaron la serie en sus dos mejores partidos desde la línea de tres puntos. Aunque alcanzaron la decena de triples en los dos primeros partidos, en ninguno de ellos superaron el 30% de acierto en el triple; 25% en el Game 1 y 27,5% en el Game 2. La canasta que les concedió la victoria en el tercer encuentros fue una clara muestra de su mejora en el tiro exterior, ya que consiguieron 13 triples con un 32,5%. De igual manera, su segunda victoria en la serie fue su mejor partido desde la línea de tres puntos, anotando 17 triples de 44 intentos (38,6%).
Importancia del tercer cuarto
El parcial favorable para los Raptors en el tercer cuarto del Game 4 (32-24) no fue algo aislado. Los canadiense se han impuesto a los Celtics en todos los terceros cuartos de la eliminatoria, lo que resulta un factor determinante. De hecho, la igualdad del Game 3 que derivó en el triple decisivo de O.G. Anunoby fue generada en este periodo, donde los Raptors redujeron la ventaja que Boston tenía al descanso a tan solo tres puntos. Cuestionado por ello, el entrenador de los Celtics, Brad Stevens, señaló ser consciente de esta tendencia.
«Pienso que comenzamos el tercer cuarto realmente flojos», explicó Stevens tras acabar el cuarto partido “Simplemente no pensé que jugáramos bien; concedimos cuatro bandejas desde el principio. Están cambiando las defensas y tienen jugadores atléticos que pueden hacerlo. Tienen muchachos realmente inteligentes, la forma en que juegan; están acostumbrados a rotar y hacer todo eso», continuó.
Defensa sobre Siakam
La buena organización defensiva de los Celtics permitió frenar el rendimiento de Siakam con respecto a la eliminatoria contra los Nets, donde fue el segundo máximo anotador de su equipo con 20,8 puntos por partido. Así, la victoria de los Raptors en el cuarto partido coincidió con la mejor actuación de Pascal Siakam en esta eliminatoria. Tras promediar 15,3 puntos y 6 rebotes en los tres primeros encuentros de la serie, sus números ascendieron hasta los 23 puntos y 11 rebotes en el Game 4, siendo el líder de los canadienses desde los instantes iniciales.
«Pienso que siempre podemos llegar a otro nivel», dijo Siakam al término del cuarto partido. «Me parece que podemos hacer eso y lograr que todos hagan ‘clic’ en el momento adecuado. Una vez que lo logramos somos un equipo muy especial» comentó.
(Fotografía de portada: Douglas P. DeFelice/Getty Images)