Uno de los mejores jugadores de la historia del baloncesto español y europeo decidió poner punto y final a su etapa con España. Juan Carlos Navarro deja la selección a sus 37 años, con un bronce en el Eurobasket 2017 como premio final y con un palmarés legendario.
Todo empezó en Varna
Varna, Bulgaria, costa del Mar Negro, tercera ciudad más poblada del país. Ahí dio sus primeros paso el mito de Juan Carlos Navarro, campeón en 1998 del Europeo Junior, en los inicios de esa generación dorada del baloncesto español que tendría su continuidad en el Mundial de Lisboa 1999, con el oro ante los Estados Unidos y ya su plasmación en la selección absoluta, donde Navarro, Pau Gasol y compañía empezaron a cincelar la gloria en 2001. Antes, el propio Navarro ya había debutado con España en el año 2000 y puso el pie en los Juegos de Sydney, primera parada de sus cinco participaciones consecutivas en unos Juegos, más que ningún jugador español en toda la historia y empatado a nivel mundial con Andrew Gaze, Teresa Edwards, Teófilo Cruz y Oscar Schmidt.
En los Juegos Navarro sumó dos platas, en 2008 y 2012, frente a los Estados Unidos, y en 2016, un bronce contra Australia.
El Eurobasket de 2011
Posiblemente la mejor versión que vimos jamás de Navarro. Él mismo se refirió, tras el encuentro de Rusia que valía el bronce en el Eurobasket 2017, que la semana de Lituania en 2011 es uno de los mejores recuerdos de su paso por la selección española. Y es que Navarro, en la recta final de aquella cita continental, firmó actuaciones antológicas como los 35 puntos en las semifinales ante Macedonia. España sumó el oro y Navarro fue MVP del torneo. Ese oro era el segundo consecutivo, tras el conquistado en 2009 en Polonia y al que Navarro sumaba el bronce de 2001 y las platas de 2003 y de 2007. Con el bronce de 2017 cerraba su círculo de medallas no sólo en el Eurobasket —2 oros, 2 platas y 2 bronces— sino también con España.
El Mundial de 2006
Uno de los momentos cúlmenes de la historia del baloncesto español llegó en Japón, en el Mundial que consagró definitivamente a España como el centro del universo de este deporte. Navarro fue parte de ese oro, el primer y hasta la fecha único metal mundialista de la selección, en un lustro donde no se bajaron del pódium internacional desde ese 2006 hasta el aciago Mundial de Turquía en el que la ausencia de Pau Gasol pesó más de lo esperado.
Un hombre récord
El pasado 15 de agosto, Navarro superaba a Juan Antonio San Epifanio, Epi, como el jugador con más internacionalidades absolutas con España (240). Un número que alargó hasta los 253 duelos (134 como titular), el último de ellos, el del citado y valioso bronce contra Rusia.
La Bomba deja la selección en el Top-5 de máximos anotadores históricos (2.796 puntos), como máximo triplista y con la citada marca de jugado con más internacionalidades. Se va con 10 medallas absolutas: 3 oros, 4 platas y 3 bronces. Ahora empieza su leyenda.