Trae Young se enfrentó esta pasada madrugada a un lanzamiento que, más que un partido, valía una temporada. Con 117-116 en el marcador y 3 segundos para el final, el base tenía en sus manos el destino de los Hawks, que habrían quedado eliminados si hubiese fallado pero que terminaron ganándose dos días más de vida gracias a un triple que es ya historia de la NBA por su valor. Un triple que marca la diferencia entre estar de vacaciones o prepararando con ilusión un Game 6 en casa.
Con motivo de esta acción, aprovechamos para repasar otras canastas similares que evitaron la eliminación de un equipo que estaba contra las cuerdas. Tiros que salvaron temporadas. O que por lo menos, las alargaron un poquito.
Gary Neal, 2011
Y es que no puede considerarse que la temporada 10-11 de los Spurs haya quedado salvada, pero desde luego sí tuvo un final algo menos amargo gracias al triple con el que Gary Neal forzó la prórroga en el Game 5 de la eliminatoria ante los Grizzlies. Con 3-1 a favor de Memphis en el global, el cuadro de Tennessee ganaba por 94-97 y estaba a 1,7 segundos de certificar su pase a la segunda ronda, pero dicho lapso fue suficiente para que Gary Neal recibiese el saque de banda de Ginóbili, diese un bote a su derecha, lanzase sobre la defensa de Rudy Gay, y anotase sobre la bocina el triple que forzó la prórroga. Prórroga en la que los locales se impusieron para garantizar su supervivencia.
No obstante, el curso acabó para ellos solo dos días después, pues no fueron capaces de estirar la hazaña y terminaron cayendo en Memphis en el sexto duelo. Aquella fue la cuarta ocasión en la historia de la liga en que un octavo clasificado eliminó al líder de su conferencia, de modo que el heroico triple de Gary Neal no evitó que los Spurs entrasen en esta lista de primeros clasificados de la que nadie quiere formar parte.
John Wall, 2017
Como el de esta madrugada, este triple tuvo como víctima a los Boston Celtics, aunque en esta ocasión hablamos de un Game 6 de unas semifinales de conferencia. Con 3-2 para los de Massachusetts y 89-91 en el marcador, los Wizards necesitaban una canasta en los últimos 7,7 segundos si no querían que el curso acabase para ellos. John Wall fue el encargado de asumir la responsabilidad de salvar la temporada de los suyos, y lo hizo anotando un triple que valió la victoria y que llevó aquella serie al Game 7.
Sin embargo, como ocurrió con el triple de Neal, esta canasta solo sirvió para dar a Washington un partido más de vida, pues Boston hizo valer el factor cancha en el séptimo encuentro y privó a los capitalinos de las que habrían sido sus primeras Finales de Conferencia desde 1979. Y de hecho, es incluso debatible si en aquel momento se vivió el principio del fin de aquellos Wizards.
Tim Thomas, 2006
No serán pocos los aficionados de los Lakers que recuerden con dolor el nombre de Thomas, autor del triple que llevó a la prórroga el Game 6 entre los angelinos y los Phoenix Suns de la primera ronda de 2006. Tras una última posesión caótica, los locales no pudieron evitar que el alero lanzara un tiro abierto que puso el 105-105 en el marcador y forzó cinco minutos de tiempo extra. Cinco minutos en los que el cuadro de Arizona logró imponerse y llevar la eliminatoria al séptimo partido.
En aquel caso, sin embargo, sí fueron los Suns quienes se llevaron también el siguiente duelo, confirmando un pase a la siguiente ronda que nunca se habría dado de no ser por el triple de Thomas. Phoenix se convirtió en aquel momento en el octavo equipo en remontar un 3-1 en la historia de la liga, y terminó llegando a las Finales del Oeste pese a haberse visto desde tan temprano con la la soga al cuello.
Ray Allen, 2013
Seguramente el que menos presentación necesite. Una acción que está indiscutiblemente entre los tiros más importantes jamás anotados en la NBA. Los Spurs, a un paso del anillo. Los Heat, a unos pocos segundos de otras Finales perdidas. Pero Bosh coge el rebote y se la da a Ray Allen. El resto, es historia.
Allen empató el partido, Miami se llevó la prórroga y conquistó el tercer anillo de su historia en el Game 7, un anillo que es imposible no asociar a la figura de Ray. Porque aunque no anotó el tiro que valió la victoria, sí anotó el que evitó la derrota. Y ese puede resultar incluso más complicado de asumir.
Veremos si el triple de Trae Young se une a la lista de las canastas épicas que solo estiraron la serie una noche más o si los Hawks consiguen dar más vida de la esperada a esta eliminatoria en el Game 6. Por ahora, ha permitido a Atlanta soñar e ilusionarse. Y eso ya tiene valor de por sí.
(Fotografía de portada: Maddie Meyer/Getty Images)