Un soldado caído de pie en los Boston Celtics

En Boston cuesta recordar una apuesta a mediados de temporada como la ejecutada por Derrick White. Durante la última etapa de Danny Ainge al mando de las oficinas se había convertido en costumbre apelar al conservadurismo con la falsa expectativa de ganar claramente todos y cada uno de los movimientos de mercado. Así, a la espera de que la oportunidad perfecta se postrase ante ellos, el equipo fue perdiendo talento ante la impasibilidad de la gerencia.

Las últimas jornadas de mercado invernal protagonizadas por Brad Stevens son una respuesta frontal a este modus operandi. En principio, el único objetivo realista para las últimas horas de mercado radicaba en despojarse de unos cuantos salarios para evitar el puesto de lujo. Pero no contento con conseguirlo, el general manager de los Celtics tornó una situación de desventaja en una oportunidad para mejorar al equipo de forma inmediata. Con Ainge, dar una primera ronda y dos activos de rotación para conseguir a un jugador de rol habría sido inadmisible. Pero así son las cosas ahora en Boston.


Para leer este texto completo y acceder a muchas más ventajas suscríbete a Extra nbamaniacs (nbamaniacs.com sin publicidad + podcast + textos especiales + newsletter + chat en Discord con redactores y otros suscriptores)

EXTRA NBAMANIACS

Nuestro trabajo en nbamaniacs es apoyado por lectores como tú. Conviértete en suscriptor para acceder a beneficios exclusivos: artículos especiales, newsletter, podcast, toda la web sin publicidad y una COMUNIDAD exclusiva en Discord para redactores y suscriptores.