Finalizando el año, todo el mundo aprovecha para hacer un repaso mental de cómo le han ido los últimos doce meses; si se han cumplido las cosas que esperaba o si realmente fue peor de lo que se creía.
Matt Barnes, en vez de guardarse esas ideas para sí mismo, ha decidido trasladarlas a un post en Instagram en el que ha calificado 2015 como el peor año de toda su vida.
Algunas de las claves para entender por qué dice esto son que «he perdido a la mujer que amaba, la madre de mis hijos«, teniendo que alejarse de lo único que realmente ama: «¡MI PROPIA FAMILIA!».
Lo que señala Barnes tiene que ver con lo sucedido hace unos meses, cuando el jugador de los Grizzlies acudió a una fiesta en la casa de Gloria Govan (su ex-esposa) y se lio a puñetazos con Derek Fisher, quien mantiene una relación precisamente con Govan. Barnes fue sancionado esta semana con cinco partidos por protagonizar tal altercado con el entrenador de los Knicks.
De este modo cuenta Barnes lo sucedido bajo su perspectiva:
“He estado metido en un ‘triángulo ofensivo’ con mi ex y con un chivato. Me estoy refiriendo a mi excompañero y amigo, que actuó por detrás arruinando lo que tenía con ella. Le traté como a una serpiente y luego él se fue a decírselo a la policía y a la NBA, en lugar de ser un hombre y seguir adelante”.
Palo a Memphis y a Rihanna
A Barnes no le gusta la nueva ciudad en la que vive.
El jugador ha lamentado «haber sido traspasado del equipo [los Clippers] y ciudad [Los Angeles] que amaba. Ellos lo llaman negocio».
Barnes también aprovechó para lanzarle un dardo a Rihanna, con quien se dice que mantuvo una relación durante un tiempo. Ella siempre negó la mayor, pero Barnes ya no se ha callado al respecto: «Lo más gracioso sobre los mensajes y las fotos que hay es que ellas no mienten».