Después de siete temporadas y media ininterrumpidas en Detroit, Andre Drummond ha visto cómo su carrera se ha transformado en un constante cambio de destinos y compañeros. Tras firmar con los Chicago Bulls este verano, el interior defenderá la camiseta de su quinto equipo diferente desde su traspaso a Cleveland en febrero de 2020.
Lo que a muchos le supondría un constante cambio de aires molesto y fastidioso, para Drummond no es más que otra etapa más de su carrera que afronta con optimismo y diversión. «Es como una excursión», afirmó el jugador este sábado durante la celebración de un campus de baloncesto juvenil en Connecticut. «Me he mudado mucho. Pero solo controlo lo que puedo controlar. Para mí, es divertido. Tienes que verlo así, como un viaje divertido. Amaba Detroit tras estar ocho año seguidos allí. Detroit me dio la carrera que tengo hoy. Ahora, el ver diferentes ciudades y estar en franquicias distintas me ha permitido experimentar diferentes culturales. Me lo he tomado como una etapa divertida.»
Drummond ha completado una última temporada un poco convulsa. Después de empezar el curso como suplente de Joel Embiid, su traspaso a Brooklyn lo impulsó inmediatamente al puesto de pívot titular, promediando 11,8 puntos y 10,3 rebotes en 22,3 minutos por velada. Ahora, en Chicago partirá de nuevo como suplente de Nikola Vucevic.
A pesar de este rol menguante que ha seguido durante las últimas temporadas, Drummond espera prolongar su carrera en la NBA bastantes años más. El dos veces All-Star ha liderado la liga en rebotes en cuatro ocasiones y tan solo ha disminuido sus promedios por debajo de las diez capturas por partido en dos campañas.
Así, Drummond tiene muy claro cuál será su legado en la NBA cuando cuelgue las zapatillas. «Creo que ya estoy allí. Cuando me retire seré el mejor reboteador de todos los tiempos, si es que no lo soy ya.»
Actualmente, Drummond ha capturado un total de 9.519 rebotes, lo que supone el 46º máximo registro histórico en la liga. Si su papel en los equipos en los que milite sigue reduciéndose, es posible que no pueda incluir su nombre en el Top 10 de todos los tiempos —cerrado por Dwight Howard y sus 14.627 capturas— ni, incluso, en el Top 15, cuyo corte lo establecen los 13.099 rebotes de Shaquille O’Neal.
(Fotografía de portada de Mark Brown/Getty Images)