Atlanta Hawks lleva varios años viviendo en un quiero y no puedo. Con 10 campañas consecutivas en playoffs y una temporada regular de 60 victorias (2014-15), nadie puede discutir que ha estado entre los mejores equipos de la NBA. Sin embargo, siempre ha dado la sensación de que su techo estaba ahí, en vivir en la élite sin poder realmente aspirar a más.
Esa situación, extendida a toda una década, se ha dado contando con buenos jugadores que casi le obligaban a competir año a año. Eso ha cambiado. Al Horford juega en Boston Celtics y Paul Millsap se marchó en la pasada agencia libre a Denver Nuggets. Los motivos para evitar una reconstrucción, tal y como explica el propietario, Tony Ressler, han desaparecido.
«Nunca tuvimos la opción de ser un contendiente. Tampoco lo éramos antes. Vi al equipo pasar de 60 victorias a 48, y luego a 43. Y tampoco hicimos muchos cambios en ese trayecto. Es más, pensamos que habíamos añadido piezas. Digamos que llegué a la conclusión, ayudado por Travis Schlenk y Mike Budenholzer, de que no íbamos en la dirección correcta», explica a David Aldridge de TNT.
No le falta razón a Ressler. Cuando un equipo se sitúa en unas 50 victorias es complicado salir de ahí. Por un lado es imposible –la excepción es Boston– conseguir grandes jugadores vía Draft. Por otro, si quieres evitar que tus mejores chicos, los que te dan las victorias, se marchen, tienes que darles el dinero que piden aunque eso te imposibilite ir a por otros jugadores. Acabas viviendo en un continuo déjà vu de postemporadas y eliminaciones.
Ya tienen al líder
Empezar de cero es una cosa y otra bien distinta hacerlo con el primer escalón construido. Este último es el caso de la franquicia de Georgia. Dennis Schroder, a quien se confió la titularidad el curso pasado, ha tomado las riendas del equipo sin titubeos. En los últimos playoffs estuvo genial y en la presente temporada está promediando 22,2 puntos y 6,8 asistencias. Atlanta tiene mucho trabajo por delante, pero encararlo con un base como el alemán invita a ser optimistas.