Durante el quinto partido de la serie entre Clippers y Grizzlies, Blake Griffin sólo pudo disputar 19 minutos. El ala-pívot se retiró a menos de 6 minutos del final del tercer cuarto y ya no pudo volver al encuentro.
Griffin, quien no había estado cómodo toda la noche, había intentado seguir en pista, pero el dolor que iba avanzando según pasaban los minutos le impedía moverse con normalidad.
Tras finalizar el partido, los Clippers confirmaron que Griffin sufría un esguince de tobillo, el cual se produjo en el entrenamiento del lunes tras pisar a Lamar Odom. Lo cierto es que nadie de la franquicia, ni siquiera el entrenador, dijeron nada de la lesión antes del partido.
“Sigo siendo optimista”, dijo Griffin. “Nuestro equipo de preparadores hizo un gran trabajo con el tratamiento. Nunca había tenido un esguince de tobillo como este”.
Griffin terminó el encuentro con 4 puntos, 5 rebotes y 5 asistencias y es duda para el sexto encuentro de la serie.