Estamos ante una de las mejores generaciones de novatos de los últimos años, pero… ¿llegará al nivel de la que sido muchas veces señalada como la más talentosa de la historia? Rick Carlisle cree que sí.
Hablamos de una clase en la que contamos con una gran variedad de jugadores que parecen llamados a marcar una época. Donovan Mitchell, Jayson Tatum, Lauri Markkanen, Kyle Kuzma, Lonzo Ball, John Collins, De’Aaron Fox, Josh Jackson, Dennis Smith Jr., Frank Ntilikina… Todos ellos han demostrado sus cualidades en mayor o menor medida, pero la tónica general es que han llegado listos para la batalla.
«Tomó 10 o 15 años ver cuán grande era la clase de 1984. Este draft tiene la misma oportunidad de tener un impacto similar», comenta el entrenador de Dallas Mavericks recordando aquel año en el que Michael Jordan, Charles Barkley, Hakeem Olajuwon y John Stockton dieron el salto al profesionalismo.
Cuestión de tiempo
Tener la mejor materia prima no asegura que el resultado vaya a ser excelente. Con esa premisa, Carlisle explica que solo el paso de los años dirá si estos chicos llegan a la excelencia. «Llegar a ser un gran jugador marcando una generación como Hall of Fame es algo más que un buen draft. Tienes que hacer muchas cosas bien. Debe ser guiado por el camino correcto y encontrarte en las situaciones adecuadas con otros buenos jugadores».