La amplia trayectoria seguida por la carrera de Carmelo Anthony ha comprendido diversas etapas que lo han llevado a ser considerado uno de los mejores anotadores de siempre hasta su actual rol como pieza valiosa saliendo desde el banquillo. Ahora, el último paso que ha dado ya en su ocaso profesional ha respondido al deseo de rellenar el principal vacío que luce su currículum: el anillo de campeón.
El diez veces All-Star se unió esta temporada baja a LeBron James, Anthony Davis y Russell Westbrook en Los Angeles con el claro propósito de alcanzar la gloria colectiva. Carmelo defendió durante seis campañas y media la camiseta de los Knicks, la cual representa uno de los mayores mercados de la NBA, pero cree que jugar en California supone una experiencia distinta teniendo en cuenta su situación actual y el contexto de la franquicia.
«Creo que será divertido. Realmente lo voy a disfrutar», afirmó Anthony según recoge el medio Complex. «Me he sentado a reflexionar sobre la lealtad y el aprendizaje del negocio del baloncesto, así que ahora estoy en esta parte de mi vida y de mi carrera en la que lo entiendo. Así que la abordaré con una mentalidad diferente y un tipo de comprensión de lo que está en juego: qué tenemos que hacer y qué tengo que hacer para que esto funcione. Estoy deseando que esto empiece, para ser sincero.»
La experiencia es un grado y Carmelo asume ahora con naturalidad su condición de pieza secundaria delimitada a un papel muy concreto. Esta temporada formara parte de un roster muy veterano que cuenta, también, con varios jugadores jóvenes con vocación ofensiva sobre los que puede actuar como mentor.
Los Lakers suman nueve jugadores por encima de los 30 años. Este contexto ha devuelto dudas acerca de la condición física del núcleo para afrontar una temporada tan exigente, aunque Carmelo cree que esto no supone un hándicap sino un plus de sabiduría de la que sacarán partido.
(Fotografía de portada de Kevin C. Cox/Getty Images)