Aún no ha firmado su contrato, pero parece un mero formalismo. Leandro Bolmaro llega a la NBA a sus 21 años tras como número 23 del draft de 2020. Ha pasado el último año curtiendo su juego en España con el Barcelona y ahora, tras los Juegos Olímpicos de Tokio, está listo para continuar su carrera junto a los mejores jugadores del mundo. Desconocemos qué rol tendrán en Minnesota, si tendrá muchos minutos al principio o si deberá ir ganándoselos, pero de lo que no albergamos dudas es de que su entrenador, Chris Finch, está encantado de tenerlo a bordo.
«Es un jugador intrépido. Nos encanta eso de él. Compite, es animado… Simplemente sabe cómo jugar al baloncesto. Se mueve bien sin el balón, encaja con todas las piezas que ya tenemos. Eso le da una base para poder llegar a la cancha y ayudar desde el primer momento. Será una gran pieza complementaria», expresa el head coach durante la presentación del argentino.
Para Bolmaro es un gran cambio, uno ilusionante y que aún le cuesta ver como real. Es un joven con grandes aspiraciones que entiende que alcanzar las metas deseadas depende de su tesón en el día a día. «He esperado este momento durante mucho tiempo. Estoy muy agradecido de estar aquí. Este es un sueño hecho realidad. Voy a disfrutar y trabajar y… trabajar».
En su segundo año en la liga española de baloncesto, Bolmaro se ha mostrado como un jugador esencial del Barcelona, sobre todo en lo que concierne al juego exterior; tanto es así que en la ACB ha conseguido un 45,3% en triples, mientras que en la Euroliga se ha ido al 38,1%. La firma de su contrato de novato es inminente.
(Fotografía de Ethan Miller/Getty Images)