Con un contexto tan sumamente extraño como el que está rodeando a los Clippers con el tema de la lesión de Blake Griffin, la franquicia angelina hizo exactamente lo que más necesitaba para salir de un apuro así: ganar.
Un gran Chris Paul anotó 19 de sus 26 puntos durante la segunda mitad, echándose a su equipo a la espalda cuando más pesaba la responsabilidad y guiándolos al triunfo por 89-91.
“Con todas las cosas que han sucedido en las últimas 48 horas, siempre decimos que es el propio baloncesto el que devuelve al equipo a su sitio. Ha sido una buena victoria”, dijo Doc Rivers, premiando el esfuerzo de los suyos.
“Es duro, aunque no sé mucho al respecto”, también señaló Paul sobre lo sucedido con Griffin y su incidente. “Pero tengo que conducir a este equipo. Tenemos partidos por delante para ganar”.
Ni los 31 puntos y 11 rebotes de Paul George fueron suficientes para espolear a los Pacers, ni cuando estos tuvieron la oportunidad de forzar la prórroga o incluso ganar el partido.
“Tuvimos muchas jugadas que podríamos haber convertido, pero hemos ejecutado mal”, dijo George.