Los Clippers no pudieron vencer, pero Chris Paul sí se llevó un reconocimiento individual que no muchos tienen.
El base alcanzó las 7.000 asistencias en la NBA, convirtiéndose así en el cuarto jugador más rápido de la historia en lograrlo.
El primero en esa lista es John Stockton (625) , después vendrían Magic Johnson (637) y Oscar Robertson (667 partidos), y ahora en cuarto lugar está Paul (706).
«No tenía ni idea de que había sucedido», confesaba un feliz Paul, que también admitió no saber el listado de jugadores con los que ahora comparte récord.