Los Cavaliers cerraron su gira de seis partidos fuera de casa con una victoria ante unos Rockets que ofrecieron su peor versión. Los de Ohio se impusieron 77-91 y ya esperan el compromiso del próximo lunes ante los Golden State Warriors.
El encuentro comenzó a decantarse a favor de los visitantes en el segundo cuarto y a partir de ahí prácticamente no hubo más historia.
Kyle Irving fue el máximo anotador con 23 puntos. El base se mostraba contento de volver a casa después de muchos días en carretera. “Hemos estado de gira mucho tiempo. Pero bueno, es una forma de hacer aún más equipo. Estar rodeado de estos chicos no lo cambiaría por nada del mundo”, comentó Irvin en declaraciones que recoge Associated Press.
LeBron James terminó con 19 puntos, 7 rebotes y 7 asistencias. El otro miembro del Big-Three, Kevin Love, sumó un doble-doble de 11 puntos y 13 rebotes para un equipo que venía de perder contra los Spurs en su única derrota de la gira.
Los Rockets, sin respuesta
Volvieron a pecar de indolencia y cierta dejadez unos Rockets muy irregulares en donde su estrella, James Harden, apenas anotó 11 puntos, su cifra más baja de la temporada. El escolta terminó con 2 de 10 en tiros de campo, 0 de 5 en triples , además de perder 8 balones.
Dwight Howard aportó 14 puntos y 11 rebotes, insuficientes para que los Rockets continuaran con su racha de victorias (cinco seguidas hasta ayer). El pívot señaló tras el partido: “Teníamos que ser agresivos y esta noche no lo hemos sido. Nos hemos relajado y no podemos relajarnos ante nadie, sobre todo si quieremos ser un gran equipo”.