La NBA no ha tardado en imponer las correspondientes sanciones a los jugadores que terminaron expulsados en el encuentro entre Pacers y Jazz del pasado jueves. En él, Rudy Gobert y Myles Turner terminaron enzarzados después de que el francés arrastrase al de Indiana al suelo, lo que llevó a este a empujarle y provocó que ambos tuviesen que ser separados antes de que la situación pasase a mayores.
Esto se saldó con la expulsión de ambos del partido, aunque no fueron los únicos, pues Donovan Mitchell y Joe Ingles, cuya intervención en el conflicto fue, en resumidas cuentas, poco pacificadora, tuvieron que poner también rumbo a vestuarios. Por tanto, la liga ha optado por multar a los cuatro jugadores, aunque ninguno de ellos ha recibido una suspensión.
El que ha salido peor parado es Gobert, a quien, por ser quien inició el conflicto, le ha sido impuesta una sanción de 35.000 dólares, mientras que Turner tendrá que abonar 25.000 por haber hecho que la situación pasase a mayores. Mitchell, por su parte, ha sido multado con 30.000 dólares por «burlarse y provocar verbalmente a los oponentes», e Ingles tendrá que pagar 20.000 por un «contacto inapropiado con un árbitro», que es el eufemismo que ha usado la NBA para contar que el australiano entró en la trifulca propinando un empujón al colegiado.
(Fotografía de portada: Michael Reaves/Getty Images)