El sábado pasado Sacramento Kings cayó derrotado en su visita a Utah en un partido en el que los Jazz lanzaron hasta 35 tiros libres. Una cifra que provocó el desaire de De’Aaron Fox hacia los árbitros al término del encuentro. «[El arbitraje] es horroroso. No es que pida ir más a la línea de libres, es que hay cosas al otro lado de la cancha que no puedes pitar. Y si las pitas, debería haber un criterio para pitarlas en ambos lados». Sacramento tan solo acudió 22 veces a la línea del tiro libre.
La estrella de los Kings también les hacía saber su disgusto con la reacción que habían tenido los árbitros a la hora de establecer comunicación con ellos. «Cuando alguien trata de hablarte, no deberías llevártelo tan rápido a lo personal». Viendo las consecuencias que podrían tener sus palabras, su amigo Donovan Mitchell trató de apartarlo de los colegiados. Pero el acto de compañerismo finalmente no ha funcionado y Fox tendrá que abonar 20.000 dólares a la Liga.
Los Kings acumulan siete derrotas con aquella y la sumada esta misma noche ante Pelicans. En la que, esta vez sí, han lanzado 37 veces desde el tiro libre por los 39 intentos de Nueva Orleans. El tren del play-in cada vez se les escapa más a Sacramento y la tensión se comienza a notar.
(Fotografía de portada de Jacob Kupferman/Getty Images)