La carrera NBA de Demetrius Jackson dista mucho de ser la soñada. Ya empezó con pie izquierdo desde el principio, cuando se le proyectaba como un primera ronda del Draft 2016 y terminaba cayendo, sin embargo, hasta el puesto 45º. Terreno escarpado y abrupto ante el que no desfallece el ex de los Fighting Irish.
De Boston a Houston y de Texas a Philadelphia. Dos temporadas, tres equipos, 20 partidos y apariciones demasiado esporádicas como para valorar su verdadero potencial, el cual está trabajando mucho más en la G League que en la NBA en sí misma. Y justo para seguir peleando en la frontera le han vuelto a fichar los 76ers.
El curso pasado le hacían un contrato dual y se estrenaba con tres partidos en enero con una media de 5,7 minutos, 2,7 puntos y 1,3 asistencias. Ahora, tras disputar con ellos la Summer League –informan desde Philly.com–, recibe un nuevo two-way contract, por lo que estará a disposición de Brett Brown un máximo de 45 días para situaciones de necesidad.
Pero con Ben Simmons, Markelle Fultz y T.J. McConnell, no parecen los 76ers tampoco el lugar ideal para que este point guard se haga un hueco en la mejor liga del mundo.
Watch Demetrius Jackson (@D_Jay11) taking 3️⃣s long after #Sixers minicamp practice ended. pic.twitter.com/4ykzZ4sLai
— Jessica Camerato (@JessicaCamerato) 3 de julio de 2018
Aunque gracias a Jessica Camerato podemos comprobar que el triple en estático no se le da nada mal, y en Philly han perdido mucha pólvora from downtown este verano.