Si durante la temporada regular brilló, en playoffs está siendo directamente una auténtica locura. Jalen Brunson está siendo quizás el MVP de la presente postemporada y en el segundo partido ante Indiana volvió a demostrarlo a base de magia sobre el parqué.
Tras cuatro partidos consecutivos de al menos 40 puntos, en el Game 2 contra los Pacers apenas pudo jugar en el primer tiempo por un problema en el pie; sin embargo, ello no evitó que en el segundo se levantase para irse hasta los 29 y dirigir el triunfo de los Knicks mientas acumulaba un +26 en pista. Cuestionado por tal paso al frente, Donte DiVincenzo explica la gran diferencia existente entre tenerle en pista o no.
«Cuando está ahí afuera, hay un nivel de calma diferente. Sabemos que haremos el tiro correcto cada vez y hay un nivel de confianza distinto por parte de todos cuando lo tenemos en cancha con nosotros. Cada uno puede asentarse y jugar su propio juego», comenta a Fred Katz de The Athletic.
La realidad es que los playoffs de Brunson están siendo una auténtica locura. Con ocho partidos disputados está en un promedio de 35,6 puntos, 8,1 asistencias y 4,4 rebotes, números que pueden conducir a los neoyorquinos a sus primeras finales de la Conferencia Este desde el año 2000. Sí, Brunson está haciendo historia.
(Fotografía de Jared C. Tilton/Getty Images)