La noche en la que Kobe Bryant fue el protagonista absoluto, y merecido, de la NBA, quiso honrar a una de sus figuras más grandes de la historia con una serie de partidos electrizantes y de finales cardíacos. Fue el caso del Indiana-Boston y lo vimos también en el Timberwolves-Blazers, que acabó con triunfo de los de Minneapolis gracias a dos tiros libres de Jimmy Butler a menos de 3 segundos para la conclusión.
Hace un mes, los Wolves caían ante los Pistons porque Jimmy Butler no supo ejecutar los tiros libres que podían haber cambiado la noche. Ese día, Reggie Jackson molestó con trash talking a Butler, quien 30 días después supo tener toda la sangre fría que entonces no tuvo para que los Wolves sigan asentados en los puestos punteros del Oeste. Con 18-13, marchan cuartos, justo por delante de Portland (16-14).
El excelente diciembre de Jimmy
Fue una noche muy igualada entre Portland y Minnesota resuelta con los dos tiros libres de Butler. El ex de los Bulls firmó 37 puntos, su segunda mejor marca desde que se trasladara, o le trasladaran, a Minneapolis durante la pasada edición del Draft. Es el cuarto partido de este mes de diciembre para Butler con 30 o más puntos anotados. Sus 38 tantos ante los 76ers del 12 de diciembre permanecen como el tope ofensivo para él, que además ha firmado estos 37 de anoche, los 33 ante los Clippers del 3 de diciembre y los 30 delante de Memphis al día siguiente. Butler promedia en los nueve partidos del último mes del año unos guarismos de 24,6 puntos, bastante por encima de los 17,9 de noviembre y de los 20,8 de octubre.
Crawford, luz propia
No es fácil formar parte del club de más puntos que minutos disputados. Y menos lo es en choques tan ajustados como este. Por eso es más sobresaliente si cabe la exhibición anotadora del ilustre veterano, un Jamal Crawford que hizo 23 puntos en 22 minutos y que selló su mejor marca anotadora desde que firmara por la entidad de Minneapolis para la presente campaña.