Casi se nos había olvidado. Los problemas extradeportivos, declaraciones fuera de tono, un rendimiento irregular en los últimos años… Kyrie Irving nos había empujado a un abismo sobre sí mismo del que sin duda costaba (y ha costado) recuperarse; tanto es así que cuando Dallas cerró el traspaso para hacerse con sus servicios hace meses, muchos se llevaron directamente las manos a la cabeza. Pues bien, toca olvidar todo eso. El mejor Kyrie Irving ha vuelto.
Tal cual suena. Es All-Star, es All-NBA, es campeón de la NBA… Los datos siempre han estado sobre la mesa, pero todo lo demás nos había engañado. Aunque las dudas sobre su conjunción con Luka Doncic no cesarán salvo que hagan unos playoffs espectaculares, la realidad es que Irving lleva varias noches siendo lo que es, uno de los mejores jugadores de la NBA. En ausencia de Luka –lleva tres partidos fuera por lesión–, se ha echado el equipo a las espaldas para mantener la buena línea de resultados y liderar como no hacía desde demasiado tiempo.
Con su sin igual manejo de balón y elegancia cada vez que despega los pies del suelo, anoche se fue hasta los 42 puntos, 7 rebotes y 7 asistencias en la victoria por 125-120 ante New Orleans Pelicans. Kyrie se lució, pero lo más importante es que hace algunas fechas que lo hace partido sí y partido también. De esta forma, en los últimos cinco disputados se va a un espectacular promedio de 37,4 puntos, 6,4 rebotes y 6,4 asistencias, números que acompaña con un meteórico 45,8% en triples. Sí, su baloncesto está rayando la perfección.
Confirmado que Irving está dando su mejor baloncesto a los Mavericks, ¿es suficiente para aspirar a todo? No lo parece. Aunque Doncic y él mismo estén en plena forma, a Dallas se le siguen viendo más deficiencias que a otros claros aspirantes como Denver Nuggets o Boston Celtics. En cualquier caso, deben aprovechar esa ola positiva para hacer todo lo necesario antes del cierre del mercado de traspasos para seguir avanzando. Cuando tienes dos genios de este calibre en la plantilla, todo puede pasar.
(Fotografía de Sean Gardner/Getty Images)