Los Kings lograron ayer su victoria número 42 de la temporada, lo cual les asegura acabar la liga regular con un balance positivo. Y lo más sorprendente de esto no es que no lo hayan conseguido desde 2006. Es que solo lo había logrado un entrenador en toda su historia.
Los orígenes de la franquicia se remontan a muchos años atrás, pero si nos ceñimos al momento en que el equipo llegó a Sacramento (1985), nos encontramos con un dato de lo más curioso. De las 37 temporadas disputadas desde entonces, solo en ocho habían conseguido terminar con más victorias que derrotas. Si miramos al banquillo, veremos que en todas ellas Rick Adelman era el entrenador. Y no solo eso, sino que esas fueron las únicos ocho temporadas que pasó dirigiendo al equipo.
Adelman llegó a la franquicia en 1998, año del lockout, y se estrenó con un balance de 27-23 que supuso el primer curso por encima del 50% en Sacramento. A lo largo de sus ocho años, llevó al equipo a 395 triunfos y 229 derrotas (63,3% de victorias), a unas Finales de Conferencia, y siempre ganó más partidos de los que perdió. Pero su falta de éxito en postemporada hizo que fuera despedido en 2006. Una postemporada que, desde su salida, los Kings no han vuelto a pisar.
Por tanto, contaban con un 100% de efectividad a la hora de terminar con balance positivo cuando Adelman estaba al frente y con un 0% sin él. Hasta hoy. Mike Brown ha conseguido acabar con esta particular maldición y volver a convertir a los Sacramento Kings en un equipo ganador. Ahora solo falta ver si logra mantener la regularidad de su predecesor y alcanzar el éxito en playoffs que a este se le escapó.
(Fotografía de portada: Tom Hauck/Getty Images)