La cara y la cruz de la misma moneda acompañarán a Georges Niang durante la agencia libre. El alero fue una pieza importante de la rotación de los Utah Jazz, quienes finalizaron la regular season con el mejor récord de toda la NBA. Sus 6,4 puntos, 2,8 rebotes y un 42,5% en triples en 16,0 minutos marcaron todos ellos máximos de carrera.
Su rendimiento individual tuvo su prolongación en lo colectivo. Sin ser especialmente rápido ni hábil, dio un paso adelante en defensa y en algunas ocasiones cumplió la difícil papeleta de cubrir al mejor anotador rival. En consecuencia, los Jazz fueron hasta 14,9 puntos mejores por cada cien posesiones que sus rivales con Niang en pista. Sí, la composición del quinteto tiene mucho que ver en este tipo de datos estadísticos pero lo cierto es que el de Lawrence se convirtió en un hombre de confianza para Quin Snyder.
Sin embargo, esta mejoría y buen nivel se desdibujó por completo en los playoffs. El momento más importante de la temporada. El punto crítico se produjo durante la eliminatoria de Semifinales de Conferencia ante Los Angeles Clippers, saldada con la eliminación tras seis partidos: unos paupérrimos 0,8 puntos en menos de diez minutos por encuentro. Su efectividad de cara a canasta, para olvidar: un 15,4% en tiros de campo. Dos de trece en tiros de campo. Uno de diez en triples.
«La experiencia de los playoffs es la prueba real», reconoció el jugador según recoge el medio The Salt Lake Tribune. «Es obvio que existe una gran diferencia entre la temporada reglar y los playoffs. Quiero aportar más. Esto ha sido un proceso de crecimiento para nosotros como jugadores y como organización.»
Ahora, sin embargo, todo lo ocurrido en playoffs no solo podría suponer una ruptura con los Jazz sino también un acuerdo menos cuantioso este verano, momento en el que se convertirá en agente libre sin restricciones por primera vez en su carrera. Niang ofreció un guiño a su actual franquicia durante la misma comparecencia.
«Siempre hay que avanzar. Pase lo que pase. Nunca he sido agente libre así que todo esto es nuevo para mí», continuó el alero. «Obviamente, mi corazón está en Utah. Adoro Utah. Me dieron la oportunidad de crecer y madurar como hombre y como jugador. Y estaré eternamente agradecido por eso. Me encanta estar aquí.»
Los Jazz podrían estar interesados en volver a firmar a Niang a un precio adecuado. Sin embargo, el descenso de sus prestaciones lo alejan de la Mid-Level Exception a la que podría haber aspirado. Así, la entrada en vigor de las multimillonarias extensiones de contrato de Donovan Mitchell y Rudy Gobert supondría sobrepasar el impuesto de lujo en caso de renovar a Niang.
De este modo, su continuidad se reduce a tres premisas: el deseo de los Jazz de seguir contando con él, la disposición del propietario Ryan Smith a pagar el impuesto de lujo y lo que finalmente ocurra con la situación de Mike Conley, quien también será agente libre y una prioridad mayor para la gerencia de los Jazz.
(Fotografía de portada de Jamie Schwaberow/Getty Images)